Uno de los partidos con el menor número de faltas, agregando la fluidez que César Ramos le dio al partido y dejar de sancionar faltitas que detienen el desarrollo.
El partido no exigió mucho, pero Ramos no se metió en problemas y sancionó lo necesario, nadie protesta y respetan sus decisiones, eso pocos silbantes se lo han ganado en el arbitraje.
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