Messi jugará. Falta saber si de inicio o media parte. El Madrid deberá decidir a qué juega: si va por el partido o amarra detrás. El árbitro y los asistentes estarán sujetos a la lupa, tras la denuncia de un ‘linier’ que afirmó que querían influir sobre él a favor del equipo blanco desde el Colegio de Árbitros. Las grandes claves del Clásico son futbolísticas, aunque es evidente que habrá que poner un ojo en la seguridad de un acontecimiento global.
En un partido entre los dos rivales no importa cómo llega uno u otro. Es un oasis. Da igual. Los enfrentamientos entre ambos no acaban obedeciendo siempre a los últimos resultados. Algunas veces sirven de trampolín y otras de precipicio. En este partido tiene más a perder el Madrid, que se encuentra a tres puntos del FC Barcelona en la clasificación.
Madrid
Benítez tiene dudas en su alineación. Dicen que los jugadores le comentaron que debían ir por el encuentro frente al Barça y que se comprometió a plantear así el partido. Hasta ahora las dos grandes figuras del Madrid de Benítez han sido Keylor Navas, el portero, y Casemiro, el mediocentro, junto con el lateral Marcelo. Precisamente el brasileño saldrá de titular, superada la lesión, y será una de las amenazas para el Barça.
El técnico también podrá contar con James desde el inicio del encuentro, lo que da mayor creatividad al mediocampo y más peligrosidad al ataque. Pero Benítez deberá decidir primero si juega con un 4-3-3 o con un 4-4-2 y todas las variantes posibles, entre ellas el 4-1-4-1 que tanto le gusta o el 4-2-3-1. Es evidente que el Real no va a ser un equipo previsible en el Bernabéu ante el FC Barcelona. Pero deberá adecuar su estrategia a los jugadores que tiene.
En este momento Benítez puede contar con todos, aunque se dude de la presencia de Benzema. El delantero francés es uno de los futbolistas que más combinan con el fútbol de Cristiano. Si el Madrid quiere relevar a Keylor por Ronaldo en la idolatría será necesario que el nueve francés esté en el equipo. Cristiano se encuentra más cómodo con Benzema que con cualquier otro. Pero Benítez deberá conformar un centro del campo poblado si quiere lucharle la posesión al FC Barcelona. Casemiro, Modric, Kroos, Isco o James se disputarán un puesto si juega con cuatro en la zona media. Si actúa delante con Cristiano, Benzema y Bale, sólo caben tres. La composición de esa línea será al final la que mostrará el talante de Benítez y del Madrid en el Bernabéu frente al Barça. Jugar con Casemiro o con Benzema no es lo mismo.
El entrenador blanco busca el equilibrio. Siempre lo ha buscado. Habrá que ver finalmente como resuelve el crucigrama del mediocampo. En defensa no tiene excesivos problemas ya que parece claro que actuará con Keylor, Carvajal, Ramos, Varane y Marcelo. Y ahí, la presencia final de Pepe o de Danilo encaja sin excesivos problemas si Benítez se acaba decantando por ellos.
Barcelona
El Barça de Luis Enrique no tiene tantas dudas. O, al menos, eso es lo que parece. La fundamental viene dada por el momento en el que jugará Messi. Si lo hará de titular o tras el descanso. La segunda posibilidad parece hoy la más probable, aunque la incógnita estará abierta hasta poco antes del duelo. La alineación clásica de Luis Enrique podría ser esta: Bravo, Alves, Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Iniesta, Sergi Roberto; Messi, Suárez y Neymar. Si no actuara Leo, se podría simplemente hacer un cambio y poner a Munir en la punta, manteniendo el esquema del 4-3-3, tan característico del FC Barcelona. Hay otras alternativas.
En primer lugar ver si Rakitic está recuperado. Si no actuara Messi también podría apostar por subir a Mascherano al medio y colocar a Sergi Roberto más escorado, pero Luis Enrique parece que no quiere cambiar mucho de posición a Busquets, que se está saliendo como medio centro (su verdadera ubicación) en los últimos partidos. Si fuera así (improbable) a Piqué le acompañaría otro central a elegir entre Vermaelen, Mathieu o Bartra.
En el último partido que el Barça de Luis Enrique jugó en el Bernabéu salieron en el medio del campo, Busquets, Xavi e Iniesta, un centrocampo muy tocador para mantener la posesión que funcionó bien en la primera parte, pero que tuvo más problemas en la segunda. No parece que ninguno de los dos técnicos acabe aclarando alguna duda antes del duelo, ya que también están jugando su partida previa de estrategia. La verdad, este Clásico pinta muy bien. Con dos equipos de grandísimo nivel y mucha competencia.
