El maratón de Nueva York es considerado el más grande y popular en el mundo, y obtener una inscripción puede ser casi tan difícil como correrlo. Esto, supongo es parte de su encanto.
Este maratón se celebra cada año el primer fin de semana de noviembre y se ha realizado ininterrumpidamente desde 1970, excepto en 2012, cuando el Huracán Sandy golpeó la ciudad.
Hay varias formas de conseguir un lugar para correr en la ‘Gran Manzana’. La primera y más codiciada es a través del sorteo que hacen los organizadores a principios de cada año, donde los corredores deben pagar 11 dólares (no reembolsables) para poder participar y dejar a la suerte su futuro como maratonistas.





