En un episodio que combinó humor, tensión y una inesperada lección sobre igualdad de género, dos mujeres protagonizaron una discusión por un asiento en el Metrobús de la Ciudad de México. ¡Te contamos los detalles!

El conflicto, captado en un video que se volvió viral en TikTok, escaló rápidamente hasta que un joven intervino de forma insólita: simplemente se sentó en el lugar que ambas reclamaban. “Madrugó” a las dos, y con eso, se ganó miles de aplausos en redes sociales.
La escena ha sido vista por miles y probablemente millones de usuarios que no solo rieron con el video, sino que también debatieron sobre lo sucedido. Mientras unos criticaron el pleito entre las mujeres, otros defendieron a una u otra. Pero fue el joven quien se llevó los elogios por “resolver” el problema con lo que muchos calificaron como “valentía” y una acción que promovió la igualdad de género.
VIDEO:
Camarón que se duerme, se queda sin asiento
Mientras dos señoras discutían en el Metrobús por quién ganó el asiento, un joven se adelantó sin decir nada y se quedó con el lugar pic.twitter.com/DKplcXiAvx— adn40 (@adn40) May 27, 2025
Así fue la pelea en el Metrobús
Todo comenzó en una de las corridas del Metrobús de la CDMX, cuando dos pasajeras, una de blusa verde y otra de azul, se enfrascaron en una discusión. La primera explicó que su compañera se había adelantado para apartarle el asiento: “yo le dije a ella que se adelantara para que me apartara el lugar”. Sin embargo, apartar lugares está prohibido en el transporte público.
La mujer de azul, visiblemente incómoda, se negó a ceder el asiento, y la tensión creció. En medio del forcejeo verbal, la de verde soltó una frase que no tardó en hacerse viral: “¡Vámonos paradas las dos, entonces!”. Fue en ese momento que el joven, sin decir una sola palabra, se sentó en el disputado asiento y zanjó el conflicto.
Reacciones: entre el humor y la crítica social
El clip generó reacciones de todo tipo. Algunos internautas expresaron que el joven actuó con determinación en una situación que se había salido de control. Para muchos, su gesto fue una muestra de “igualdad de género” en la vida cotidiana, ya que no se dejó intimidar por el enfrentamiento entre las mujeres.
Otros destacaron el anticivismo evidenciado en el pleito, común en el transporte público capitalino, especialmente durante las horas pico. La frase “¡Vámonos paradas las dos!” Fue celebrada como un ejemplo del ingenio mexicano para lidiar con tensiones urbanas.

Viral y simbólico: un asiento, muchas lecturas
Aunque se trató de un evento breve, el impacto del video ha trascendido más allá del entretenimiento. Para algunos usuarios, este tipo de situaciones reflejan la necesidad de reforzar normas de convivencia en el transporte colectivo, mientras que para otros, simplemente fue una muestra más del surrealismo cotidiano que reina en la CDMX.
Lo cierto es que el joven “madrugador” terminó siendo visto como una especie de héroe, y tanto él como su acción dejaron claro que, en algunos casos, la mejor solución es la más sencilla: sentarse y dejar que los demás se queden “parados”.




