NATHALIE JUÁREZ
En su faceta como directivo de Rayados, Luis Miguel Salvador firmó el contrato más importante de su vida tras contraer nupcias con su esposa María Isabel Garza.
La cita fue este sábado en la Sultana del Norte a las 14:00 horas en la Catedral de Monterrey, ubicada en el corazón de la capital norteña donde se dieron cita personalidades del medio futbolistico así como de la sociedad regia.
Fue una tarde maravillosa donde antes de que los novios hicieran su aparición, entraron un grupo de danzantes a la iglesia por el pasillo central hasta llegar al altar, posteriormente se pudo ver al dirigente albiazul en la puerta del inmueble tomado de las manos de dos de sus hijas.
Luego de las indicaciones del sacerdote, entró Salvador camino al altar con dos de sus hijas, mientras que detrás apareció su mujer María Isabel tomada del brazo de otra de sus cuatro hijas.
Dio inicio la creemos religiosa, donde poco a poco fueron arribando los jugadores del Monterrey, los primeros en llegar fueron Juan de Dios Ibarra y Leobardo López acompañado de sus respectivas esposas.
Conforme transcurrió el tiempo fueron llegando jugadores como Aldo de Nigris, Darvin Chávez, José María Basanta, Walter Ayoví, Miguel Morales, Neri Cardozo, Omar Arellano, entre otros todos ellos acompañados por sus respectivas parejas.
Sin embargo, también fueron requeridos viejos conocidos de la institución albiazul tal como el legendario Jesús ';El Cabrito'; Arellano y Duilio Davino, además de celebridades del medio artístico como el cantante Pedro Fernández.
Cabe resaltar aspectos de la ceremonia, como el momento de los votos nupciales donde se pudo percibir una gran alegría y amor entre los esposos, así mismo, dieron pie a los padrinos de iglesia en donde salió a relucir el estratega rayado Víctor Manuel Vucetich.
Cuando la hora de la entrega de arras, lazo y anillo fue algo muy lindo ya que fueron las cuatro hijas de María Isabel y Luis Miguel fueron las madrinas y dieron un mensaje a sus padres.
Llegó el fin de la ceremonia que culminó con una catedral de Monterrey abarrotada de amigos y familiares, a la salida de la iglesia fueron recibidos por un mariachi quien los acompañó de la año de sus hijas hasta la puerta del Museo del MARCO donde se llevó a cabo la recepción.
