EFE
El futbolista brasileño Kaká, aseguró que el Milan era el lugar "ideal" para recuperar las ganas de jugar que había perdido en parte en el Real Madrid, club del que se marcha ahora tras cuatro temporadas para regresar a su anterior equipo.
El mediapunta brasileño volvió a presentarse ante los medios como nuevo jugador del Milan, diez años después de que ofreciera su primera rueda de prensa como "rossonero", club en el que cosechó sus mayores éxitos, como el Balón de Oro en 2007, y en el que jugó hasta su fichaje por el Real Madrid en 2009.
El Milan "era el lugar ideal para recuperar las ganas de jugar al futbol, que perdí un poco en el Real Madrid", afirmó Kaká.
"En el plano profesional, en Madrid no me fue como quería y como todos se esperaban, pero ha sido una experiencia muy bonita. He crecido mucho, también con las dudas, las incertidumbres y las decisiones de si irme o quedarme. No me habría gustado estar sin jugar en el Real, y por esas situaciones perdí un poco las ganas de jugar al fútbol", agregó.
El brasileño aseguró que, a pesar de no haber tenido mucha continuidad de juego en el Real Madrid, ahora su condición física es "buena" y dijo que aceptó el "gran desafío" de volver al Milan al entender que con el nuevo técnico madridista, el italiano Carlo Ancelotti, los huecos en el equipo eran cada vez menos.
Asimismo negó que pueda responsabilizar al técnico portugués José Mourinho, exentrenador del Real Madrid, de su discreta participación en el club blanco durante los últimos cuatro años.
"Mourinho no tiene culpa de nada. Me ha enseñado mucho sobre el fútbol y otras cosas, a tener paciencia, más fuerza. Y Ancelotti ha sido muy sincero en este mes y medio en Madrid. El Real tenía otras ideas, nuevos jugadores, subir a jóvenes al primer equipo. Los huecos eran cada vez menos", dijo Kaká.
El mediapunta dijo estar dispuesto a jugar de inmediato en el Milan, club al que llega con la Liga italiana ya empezada y clasificado para la fase de grupos de la Champions, donde tendrá que enfrentarse al Barcelona.
"Para mí esto es un gran desafío. Me espero un buen Milan, con grandes jugadores, con experiencia internacional. Este equipo me devuelve las ganas de jugar al futbol. En Madrid ha sido una experiencia personal muy bonita, aunque profesionalmente las cosas no hayan ido como me habría gustado", apuntó.
"Es como si nunca me hubiera ido. Cuatro años son muchos, pero estos momentos son demasiado bonitos. Son días especiales para mí. Ayer con mi mujer recordaba cuando llegué al Milan hace diez años. Los momentos bonitos parecen los mismos", añadió.




