GIBRÁN ARAIGE
Su lugar a lo largo de la historia ha sido un escalón por debajo de las grandes Ligas del futbol europeo como la española, inglesa, alemana e italiana.
Pero ahora, Francia quiere dar el último salto y ser parte del glamour futbolero del Viejo Continente.
La manera de conseguirlo está muy clara: los equipos de la Ligue 1 abrieron la cartera, pagando cifras estratosféricas para traer a los jugadores de moda en su liga.
Este año el campeonato francés tendrá más reflectores. Jugadores de primer nivel mundial derrocharán su clase por los campos de juego galos, pero en especial son dos los equipos que han roto los parámetros en cuestión de fichajes: el París Saint-Germain, actual monarca de Liga y el Mónaco, un histórico a nivel local, que vuelve de la Segunda División dispuesto a recuperar su hegemonía.
La llegada del jeque Nasser Al-Khelaifi retumbó la Liga Francesa hace dos temporadas, pues compró al PSG y decidió de hacer del club parisino una potencia, primero a nivel local y luego continental.
El primer objetivo era pelear palmo a palmo junto con el Marsella, Lyon y Burdeos por la supremacía en la Ligue 1 y con fichajes como el de Ibrahimovic, Thiago Silva, Pastore y Lavezzi, lo logró.
Ahora, el reto es mayúsculo pues no sólo se busca refrendar el cetro doméstico, sino trascender en Europa. De ahí la incorporación de Edinson Cavani, uno de los delanteros más buscados en toda Europa, a quien contrataron por una cifra récord para el campeonato francés.
Ahora, la gran misión para el técnico Laurent Blanc, quien sustituyó a Carlo Ancelotti, es que la dupla Edinson-Ibra rinda frutos y funcione a la perfección.
Los analistas en Francia se preguntan si habrá un club que pueda hacerle frente al PSG. La respuesta la dio el magnate ruso Dmitry Rybolovlev (el nuevo Abramovich), quien le compró el Mónaco a la familia Grimaldi a finales de 2011 y en sólo unos meses lo devolvió a la máxima categoría y ahora lo armó hasta los dientes para pelear el título.
El Mónaco se llevó a Joao Moutinho, James Rodríguez y rompió el mercado con Radamel Falcao, otro de los artilleros más temibles de Europa.
Esta dupla de millonarios hace pensar que la Liga Francesa se resumirá a sólo dos equipos contendientes por el título, ya que los demás se encuentran por debajo de las nóminas de estos dos planteles, aunque los demás clubes se han nutrido de jóvenes con gran talento, que por lo pronto, en el Mundial Sub 20, ya dieron de qué hablar con Francia al ganar el campeonato mundial.
México de nuevo tendrá participación en la Ligue 1 con Guillermo Ochoa quien jugará su tercera temporada con el Ajaccio, ahora dirigido por Fabrizio Ravanelli; Memo será clave otra vez para el club de Córcega que buscará por tercer año en fila eludir el descenso. Otra buena temporada y el portero mexicano podría ahora sí emigrar a un club con mayor proyección o incluso a otra Liga como ya se ha especulado en otras ocasiones.
