Un total de 109 mil 318 aficionados se dieron cita en el estadio de la Universidad de Michigan para presenciar el cotejo entre Manchester United y el Real Madrid, rompiendo así la marca anterior de mayor asistencia en la Unión Americana a un juego de futbol que le correspondía al 'Rose Bowl' de California en 1984.
En aquella ocasión el recinto californiano albergó a 101 mil 799 almas para la Final de los Juegos Olímpicos entre Francia y Brasil.
Quince minutos antes de la finalización del encuentro, el estruendo de los más de 100 mil aficionados se hizo presente cuando en las pantallas apareció el dato oficial de asistencia, el cual marcaba el récord impuesto. Mismo escándalo se vivió cuando por el altavoz se anunciaba la entrada de Cristiano Ronaldo al campo.
Los organizadores del evento se mostraron sorprendidos por la respuesta de la gente, que ya había terminado con los boletos en tan solo dos días desde que salieron a la venta en abril pasado.
En su gran mayoría público estadounidense, los asistentes abarrotaron las gradas del Ann Arbor de Michigan dos horas antes del comienzo del juego, por lo que la tranquilidad del pequeño pueblo se vio trastocada.
Construido en 1927, el estadio de la Universidad de Michigan es famoso por su desarrollo en forma de platón, cuyas gradas se van extendiendo de forma horizontal con una altura que no corresponde con su enorme aforo.
De esta manera 'The Big House', como se le conoce al recinto deportivo más grande de los Estados Unidos y el cuarto en el mundo, rompe también su propia marca al superar la cifra de más de 105 mil aficionados que presenciaron un partido de hockey entre Detroit Red Wings y los Toronto Maple Leafs, a inicios de este 2014.







