Manchester City consiguió una valiosa victoria que le permite estar más cerca que nunca del líder de la Premier, el Chelsea, tras vencer 3-2 al Sunderland, en un juego lleno de emociones en la parte complementaria.
Como si fuera una práctica de tiro al blanco, los ciudadanos intentaron por todos lados abrir el marcador, pero la visita fue ordenada, con un Pantilimon soberbio que tapó todo cuanto pudo y retrasó el éxtasis en Etihad.
Tuvieron que pasar 57 minutos para que la locura llegara al partido. Primero fue Yaya Touré con un tremendo golazo que abrió el cerrojo del Sunderland y daba ilusiones a los aficionados Citizens.
La alegría en Mancheaster se prolongó, cuando al 63', Jovetic firmó otra bella anotación con un taquito imperial, que dejó sin opciones al todavía héroe Pantilomon, quien ya había evitado por lo menos tres claras de gol.
Entonces el Sunderland cambió el chip y se fue al frente. Al 68', Rodwell marcó el descuento y sólo tres minutos más tarde, por la vía penalti, Johnson empató el juego.
Parecía que el ánimo del City se vendría abajo, pero entonces apareció Lampard, y con un magnífico remate de cabeza dio el gol del triunfo a los Ciudadanos, que tuvieron por lo menos otras tres claras, pero siempre estuvo Pantilimon para evitar la goleada, aunque no pudo quitarle la primera sonrisa del año a Pellegrini y los suyos.






