AGENCIAS
Junto a los nombres de Alfredo di Stéfano, Ladislao Kubala, Amancio, Migueli, Juanito, José Ramon Alexanco o Raúl, por citar ejemplos, ya pueden aparecer los de Carles Puyol, Xavi Hernández e Iker Casillas en el olimpo de los grandes protagonistas del clásico español.
Puyol, el primero en estrenarse, el 13 de octubre de 1999, es el que más encuentros ligueros ha disputado ante el Real Madrid, con 24, aunque tan sólo uno más que Xavi y Casillas, que debutaron el 26 de febrero de 2000.
El zaguero compareció en un duelo que terminó con 2-2 y que se recuerda por el día que Raúl González mandó callar a la grada del Camp Nou.
El día que se estrenaron Xavi e Iker Casillas, Roberto Carlos, Nicolas Anelka y Fernando Morientes fusilaron al Barça de Louis van Gaal (3-0), en un duelo en el que Guardiola saltó al campo en el minuto 61 para reemplazar a Luis Enrique y Karanka, hoy auxiliar de José Mourinho, fue titular en la zaga junto a Fernando Hierro.
Aquel era el segundo clásico para Puyol, que en los últimos tiempos se ha convertido en una especie de maleficio para el Madrid de Mourinho, pues con él en el campo su equipo no pierde ante el máximo rival. La única derrota en esta etapa fue en la última Final de la Copa del Rey, en la que ‘Tarzán’ no jugó.
Casillas se graduó con 18 años bajo los postes madridistas y Xavi dejó sus primeros destellos al reemplazar a Bogarde.
Desde entonces y tras la retirada de hombres como Hierro y Sanchis, han quedado al día de hoy como las tres referencias de estos encuentros, de la rivalidad llevada a su máximo exponente en el terreno de juego.
Curiosamente, a los tres los une una dilatada relación de camaradería y amistad por su participación con la Furia Roja, principalmente a Xavi e Iker, los dos referentes de las canteras y que se han enfrentado (uniendo las demás competiciones) en 29 ocasiones, con mejor balance para el azulgrana.




