Óscar Pérez cumple 41 años de edad y quiere celebrarlo con un triunfo de su equipo, los Tuzos del Pachuca, contra Atlas.
Con más de 20 años de carrera en Primera División, el cancerbero afirma que desde su debut su idea siempre fue dejar huella y siente que ya se ganó un lugar en la historia del balompié mexicano.
"Estoy contento, motivado y orgulloso de seguir jugando futbol, tengo aún ilusiones y ganas de entrenar, siempre tuve la idea de trascender, he ido poco a poco, entro un poco más a la historia y seguiré trabajando para jugar más años. Sería bueno festejar con un triunfo.
"La clave para seguir en Primera es trabajar y llevar una vida sana, eso me ayuda, cuenta mucho él de allá arriba (Dios) que todavía no me ha quitado mis condiciones. Viene un duelo muy duro, Atlas pasa por una situación difícil, debemos pensar en sumar en casa e hilvanar otra para pelear por los primero lugares", declaró El Conejo.
Otro de los regalos que pide Pérez es un título de Liga, ya que en su carrera apenas levantó el trofeo del Torneo Invierno 1997 cuando jugaba en Cruz Azul.
"Volver a ser campeón me encantaría, es otro buen regalo; también uno de mis objetivos es siempre ser una mejor persona, la vida me ha dado lo que merezco, uno trabaja para que todo salga bien, me siento feliz", sentenció el portero del Pachuca.
Los Tuzos tienen dos partidos consecutivos de Liga con victoria, el capitán reconoce que los buenos resultados dan tranquilidad y sus aspiraciones son escalar a lo más alto de la tabla general.
"Ganar da confianza, nos permite trabajar con mayor tranquilidad. Hay que seguir igual, con mucha concentración, el equipo va bien y los resultados han sido de los mejores, vamos de menos a más, buscamos ser los mejores".
El jugador asegura sentirse bien físicamente y le gustaría seguir en Primera División; su contrato con los Tuzos del Pachuca finaliza en junio, al llegar esa fecha analizará si va a renovar o buscar otras opciones.




