Están por cumplirse tres años de que el Club Universidad se 'deshizo' de su filial de la División de Ascenso y con ello dejó desamparados a muchos jugadores que hoy son parte del recuerdo.
Vender Pumas Morelos fue de las primeras decisiones que Alberto García Aspe tomó como presidente deportivo auriazul, luego de que fuera nombrado por el presidente del Patronato Jorge Borja Navarrete.
Pumas Morelos nació en el Apertura 2006 bajo la gestión de Víctor Mahbub, y a partir de ahí fue el equipo en el que se foguearon los canteranos que posteriormente subían al primer equipo. Jugadores como Eduardo Herrera, David Cabrera, Javier Cortés, Luis Fuentes, entre otros, fueron algunos de los que se hicieron en el equipo de Ascenso y que hoy se mantienen.
Sin embargo, con el paso del tiempo la producción de Pumas Morelos dejó de ser la misma, pues lo usaban como el sitio al que 'subían y bajaban' a los canteranos e incluso experimentados que en ocasiones no tenían cupo en el primer equipo, pero con el cambio de directiva (en el Apertura 2012), con la llegada de Jorge Borja, el equipo de Pumas Morelos comenzó a caer, y al verlo como un negocio poco redituable, se decidió desaparecerlo, llevándose 'entre las patas' a decenas de jugadores.
Y es que en siete años que Pumas Morelos estuvo bajo el cuidado del Club Universidad, pasaron 107 jugadores, de los cuales 101 fueron canteranos, siendo 40 los que debutaron (aunque tres antes de que existiera la filial) con el primer equipo.
Pero para el Clausura 2013, de la nada, García Aspe les informó a los jugadores, entonces dirigidos por Raúl Servín, que la filial había sido vendida a Claudio Suárez y Jorge Campos, a partir de ahí el futuro de muchos de los integrantes de ese entonces fue incierto, pues la mayoría, pese a pertenecer a Universidad no entró en planes del club, y mientras unos comenzaron a peregrinar en la División de Ascenso, otros tuvieron que decirle adiós al futbol, o algunos, hasta la fecha, siguen buscando equipo.






