JONATAN PEÑA
Sin cantar victoria por el triunfo de su equipo en el partido de Ida de la Final, Alejandro Rodríguez, presidente de Tigres, se retiró del Nuevo Estadio Corona. Los excesos de confianza no están el en mandamás universitario, por lo que aún no se sienten Campeones.
"Faltan 90 minutos, no podemos cantar victoria ni sentirnos ganadores", sostuvo el directivo a RÉCORD al término del encuentro en la casa lagunera.
El gol de Damián Álvarez que representó la victoria por la mínima diferencia desencajó el júbilo del ingeniero que festejó brincando en el palco abrazando a familiares y algunos jugadores que no estuvieron ni en la banca.
"Siempre lo festejamos así. Fue un triunfo merecido, peleado y que los muchachos sacaron a sangre y fuego", apuntó Rodríguez.
Al retirarse del palco de visitantes hacia la zona de vestidores, el presidente universitario fue protegido por personal de seguridad para evitar cualquier agresión, pero se observó que Miguel Ángel Garza, delegado deportivo de Tigres, le reclamó a Alberto Cañedo, vicepresidente de Santos, porque un hielazo le cayó a Antonio Sancho desde la tribuna, además de las agresiones que sufrieron aficionados felinos.
"Nosotros no los tratamos así allá (en Monterrey)", se escuchó decir al directivo felino como parte de la inconformidad, mientras Cañedo sólo hizo gestos de negación.




