SALVADOR RODRÍGUEZ
El deporte de los puños le ha dado todo lo que tiene, gracias a él ha saboreado las mieles del triunfo, le ha permitido representar a México y, aún mejor, sentirse orgulloso de hacerlo. Sin embargo, este 3 de diciembre el boxeo le dará algo más al tijuanense Antonio Margarito: la oportunidad de la revancha.
Alejado del bullicio, sereno, tranquilo, encontramos al ‘Tornado de Tijuana’ en Temoaya, un pueblo enclavado en las montañas mexiquenses, un pueblo que ha abierto los brazos al peleador mexicano que en menos de un mes estará dando la revancha a Miguel Ángel Cotto, una que por cierto le sabrá más a él que al propio boricua.
Llegó el tiempo de revancha, y no precisamente porque Cotto le haya ganado la primera pelea, sino porque desde que ‘Tony’ le ganó a Miguel Ángel, aquel 26 de julio de 2008, parece que las cosas no le salieron tan bien como esperaba.
"Le gané y me cambió la vida, derroté entonces a uno de los mejores libra por libra, le quité el invicto, el Campeonato de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), él no ha cambiado mucho desde entonces, creo que me querrá boxear, pero tampoco podrá con mi corazón, vengo por la revancha, por todo lo que ha pasado, quiero volver a los primeros planos, sé que puedo continuar y llegar lejos”, expresó el tres veces Campeón Mundial Welter.
"Después de eso perdí con Mosley, no pongo excusas, batallé mucho para dar el peso, cuando subí a la pelea me deshidraté mucho, hubo muchos problemas”, apuntó el tijuanense, quien después de ese combate, en enero de 2009, fue suspendido por la Comisión Atlética de California, luego que se supone pretendía utilizar un vendaje prohibido.
"Y entonces llegó la pelea con (Manny) Pacquiao y sentía que podía ganarle, pero hice una mala estrategia, además es un excelente peleador, será difícil que alguien repita lo que él ya ha hecho”.
Pero más allá del revés, lo que más le dolió al mexicano fue que su carrera estuvo un juego. Un mal diagnóstico de los médicos le hizo pensar que no podría volver a pelear por un supuesto desprendimiento de retina que terminó con una operación de cataratas.
"Me da gusto que me digan que estoy acabado, sé que Miguel Cotto está otra vez arriba en las apuestas, espero que los mexicanos me apuesten porque como hace tres años, vamos a ganar”.




