El deporte juvenil español vivió una de sus etapas más oscuras. Sanxenxo, Pontevedra, fue testigo de una acción lamentable en el deporte juvenil. Un partido femenino de handball, categoría cadete (14-16 años), terminó en una tragedia con un muerto.
Un padre de familia de uno de los equipos, intentó agredir al árbitro, un joven de 16 años; el cual fue defendido por su abuelo. Lamentablemente, el padre no le importo y empujó al señor Andrés Rico, el cual se pegó en la cabeza; el hombre fue trasladado al hospital para fallecer posteriormente.
Belén Rico, hija de Andrés, se despidió de su padre con una carta llena de tristeza y rencor.
“Maldito el momento en que nuestro mundo se paró, maldita esa persona que no debería estar allí, maldito el momento en que dejaste de ser tú, maldito empujón, maldito el momento en que él se cruzó en nuestras vidas y nos hizo perder el control de ellas en una espiral de lágrimas y dolor”, comentó en una carta.
Esta es la carta de Belén, la hija de Andrés.https://t.co/jg70BgXivK https://t.co/cpqoVT4dh5 pic.twitter.com/DTgVMgNTt2
— 🆁🅴🅶🅻🅰18 (@reglaXVIII) February 24, 2025
¿Se tiene ubicado al responsable?
Hace dos meses que fue la tragedia, y el responsable ya se encuentra siendo juzgado por el delito de homicidio culposo. El juzgado ya le ha citado para que el investigado acuda de nuevo a declarar bajo esta nueva calificación, si bien esta fecha no ha trascendido hasta el momento.
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