Un sismo puede ser aterrador para toda la familia, incluyendo a las mascotas. Perros, gatos, aves y otros animales domésticos sienten miedo, estrés y confusión durante un temblor, lo que puede ponerlos en peligro. Prepararte con antelación y conocer las medidas de protección adecuadas puede salvarles la vida.

1. Preparación antes del sismo
Identificación: asegúrate de que tu mascota tenga un collar con placa.
Kit de emergencia: incluye agua, comida para al menos 3 días, medicamentos, correa o transportadora, y su juguete favorito para reducir estrés.
Refugio seguro: determina un lugar dentro de casa donde tu mascota pueda resguardarse, lejos de objetos que puedan caer.

2. Durante el sismo
Mantén la calma: tu tranquilidad ayuda a tu mascota a mantenerse más segura.
No intentes sujetarla a la fuerza: muchos animales reaccionan por miedo y pueden lastimarse o lastimarte.
Refugio seguro: si tu mascota está en su jaula o transportadora segura, déjala allí; si es libre, acompáñala a un lugar protegido, lejos de ventanas, estanterías y objetos que puedan caer.

3. Después del sismo
Revisa lesiones: verifica si tu mascota presenta cortes, hematomas o signos de estrés intenso. Acude al veterinario si hay algún daño.
Evita el escape: muchos animales intentan huir tras un temblor; mantén correa, transportadora o puertas cerradas hasta que se estabilice la situación.
Revisión del entorno: revisa que no haya objetos peligrosos, vidrios rotos o cables expuestos que puedan lastimarlos.
Tranquiliza y recompensa: ofrece agua, comida y caricias para ayudar a tu mascota a recuperar la calma.
Consejos adicionales
Enseña a tu mascota a familiarizarse con la jaula o transportadora para que no se estrese si necesita refugiarse.
Mantén actualizados números de veterinarios de emergencia y refugios que admitan animales.
Considera participar en simulacros familiares, incluyendo la evacuación de tus mascotas.




