La reciente publicación de archivos oficiales relacionados con el caso de Jeffrey Epstein, el financiero acusado de tráfico sexual de menores, ha puesto nuevamente en el centro del debate público a figuras políticas y del entretenimiento cuyos nombres e imágenes aparecen en los documentos liberados por el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
Las autoridades han subrayado que la aparición de estas personas en fotografías o registros no constituye evidencia de delito ni implica acusaciones formales, sino que forma parte del material recabado durante las investigaciones federales.
¿Qué figuras públicas aparecen en los archivos Epstein?
Entre los documentos difundidos figuran imágenes y menciones de personajes ampliamente conocidos a nivel mundial, principalmente en contextos sociales o eventos privados, según consta en los archivos oficiales.
Uno de los nombres más visibles es el del expresidente estadounidense Bill Clinton, quien aparece en diversas fotografías de reuniones sociales.

Celebridades del entretenimiento que figuran en los documentos
Los archivos también contienen material visual y registros donde aparecen artistas y músicos de alto perfil, entre ellos:
Michael Jackson, cuyas imágenes lo muestran en eventos sociales junto a Epstein y otras figuras públicas.
Mick Jagger, vocalista de The Rolling Stones, quien aparece en fotografías de reuniones privadas.
Kevin Spacey, Chris Tucker y Diana Ross, cuyos nombres o imágenes figuran en distintos documentos del archivo.
Los registros no incluyen señalamientos judiciales ni acusaciones penales en su contra.

De acuerdo con las autoridades, estas apariciones reflejan coincidencias sociales o vínculos circunstanciales, sin que exista evidencia judicial que los relacione con los delitos por los que Epstein fue investigado.

¿Por qué aparecen estos nombres en los archivos oficiales?
El Departamento de Justicia explicó que los archivos incluyen fotografías, registros de viajes, entrevistas y material documental recopilado durante años de investigación. Muchos documentos presentan fragmentos censurados para proteger la identidad de víctimas y de personas sin relación directa con los delitos.

La publicación responde a una ley federal de transparencia que obliga a liberar información relacionada con el caso, aunque no todos los documentos han sido difundidos en su totalidad debido a restricciones legales y de privacidad.





