De nueva cuenta la UNAM y su comunidad se vieron relacionadas con el peligro, luego de que este lunes los estudiantes de la Preparatoria 8 "Miguel Schulz", ubicada en la alcaldía Álvaro Obregón de la Ciudad de México, fueron desalojados tras una amenaza de bomba. Aunque resultó ser una falsa alarma, el hecho generó miedo e incertidumbre entre alumnos, profesores y personal administrativo.
El mensaje de la amenaza
De acuerdo con información oficial del plantel, fue este 29 de septiembre que “se detectó un mensaje escrito de manera anónima en una hoja de papel, la cual estaba pegada en un núcleo sanitario. Este mensaje indicaba que a las 11:36 a.m. se detonaría un artefacto explosivo”.

Se mencionaba que los salones 414, 551 y 619 estaban bajo amenaza, y que el supuesto artefacto se encontraba en el asiento 8.
Aplicación de protocolos de seguridad
Ante la situación, las autoridades de la Prepa 8 aplicaron los protocolos correspondientes, que incluyeron:
- Evacuación inmediata de estudiantes, maestros y personal administrativo.
- Arribo de Bomberos de la UNAM e integrantes de la Comisión Local de Seguridad (CLS).
- Revisión exhaustiva de los salones señalados y del resto de las instalaciones.

“Concluida la revisión no se encontró ni se detectó evidencia de materiales que pongan en riesgo la seguridad de la comunidad”, informó la Prepa 8 en un comunicado.
Además, el plantel anunció que se abrió una investigación para esclarecer la amenaza y que se brindará, en caso necesario, apoyo psicoemocional y asesoría jurídica a las personas mencionadas en el anónimo.

Clases se reanudan el 30 de septiembre
Respecto a las actividades académicas, se confirmó que las clases se reanudarán el martes 30 de septiembre en los horarios habituales.
Contexto de violencia en la UNAM
Este hecho ocurre en medio de la suspensión de clases en la Facultad de Química, luego de amenazas recibidas vía redes sociales y correos electrónicos sobre posibles atentados.

A estas medidas se han sumado otras Facultades, Preparatorias y CCHs de la UNAM, que exigen mayor seguridad tras los recientes hechos de violencia, como el del pasado 22 de septiembre en el CCH Sur, donde un estudiante de 16 años murió tras ser atacado con arma blanca, presuntamente por otro alumno, identificado como Lex Ashton ‘N’.




