La pesadilla se desbordó —literal— en el norte de Veracruz. Un ducto de Petróleos Mexicanos (Pemex) se rompió a la altura del municipio de Álamo y provocó un derrame de hidrocarburo que ya contaminó más de ocho kilómetros del río Pantepec, alcanzando incluso al río Tuxpan.
El incidente, que coincidió con las lluvias e inundaciones de octubre, obligó a activar un operativo urgente de limpieza. El mismo Pemex confirmó en su último reporte de este jueves que se han recuperado 345 mil litros de crudo.

¿Qué está pasando en el río?
El río Pantepec nace en Hidalgo, atraviesa Veracruz y desemboca en el Golfo de México. A su paso abastece de agua a comunidades enteras, como Tuxpan, donde más de 90 mil personas dependen de él.
René Téllez, director de Protección Civil de Tuxpan, lo dijo claro: “Se está trabajando ya en conjunto en todos los frentes para poder minimizar el impacto ecológico”.
Pero mientras eso ocurre, se suspendió el abastecimiento de agua a la ciudad. Ahora, la población depende de camiones cisterna. Nadie sabe hasta cuándo.

¿Y la calidad del agua?
El funcionario añadió que el sistema de bombeo permanecerá inactivo hasta que se concluyan las labores de extracción del crudo y se verifique la calidad del agua.
“Hasta ahora no ha habido avistamiento de animales muertos en el cauce del río”, dijo Téllez.
Sin embargo, las imágenes compartidas por Pemex muestran la magnitud del desastre. El crudo negro flota en la superficie del afluente como una mancha tóxica que recorre uno de los pulmones hídricos de Veracruz.

¿Qué hizo Pemex?
Pemex asegura que ya reparó los daños en el ducto y reactivó las operaciones, aunque no ha revelado cuánto petróleo se derramó en total.
Para contener el desastre, desplegó más de 80 unidades, 48 cordones oleofílicos, 13 barreras marinas, cinco lanchas, retroexcavadoras y hasta una embarcación especializada.




