Víctor Guzmán regresó a las canchas nueve meses después tras superar la suspensión por doping y anotó el gol del triunfo en el Pachuca 4-3 Mazatlán FC, dejando ver en su apasionado festejo lo devoto que el futbolista de Tuzos es más allá del futbol.
El Pocho corrió hacía la línea de cal y celebró haciendo referencia a un par de tatuajes que lleva con él: el de Cristo en su pierna derecha, y el de San Judas Tadeo, en su pierna izquierda, dibujos de gran tamaño que ocupan gran parte de su muslo y a los cuales les tiene gran cariño, al dedicar el primer tanto que suma desde su suspensión.
"Los tatuajes más importantes que tengo son los de mi familia y el de Dios, esas dos cosas que me han llevado a no darme por vencido y a ser un jugador exitoso en la vida", comentaba Guzmán en entrevista con Adrenalina hace un tiempo.
Pocho tiene mas tatuajes en los brazos, aproximadamente ocho en todo el cuerpo; su gusto por estos comenzaron desde niño y se han vuelto una de sus características más allá del terreno de juego.
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