Drama en Noruega: Tottenham reacciona en el final y evita una sorpresa del Bodo Glimt

Los Spurs estuvieron cerca de perder como visitantes
Los Spurs estuvieron cerca de perder como visitantes | AP

Bodø Glimt jamás había respirado clima de Champions League con tanto fervor, y en su partido ante Tottenham era su gran oportunidad de escribir historia. A lo lejos, los fanáticos ya se imaginaban un primer triunfo continental en su casa, una revancha simbólica contra el club inglés que les eliminó el año anterior en Semis de la Europa League.

Desde los primeros compases, el local mostró sus cartas: ritmo en el ataque, presión alta y voluntad de pelear cada balón. Tottenham, por su parte, parecía sentirse incómodo en ese escenario que le exigía más mordida que fluidez. El choque avanzó entre la esperanza local y el nerviosismo visitante. Hasta que en el tramo final, cuando todo parecía dicho, ocurrió lo inesperado.

El partido se terminó por convertir en un 2-2 cuando Jostein Gundersen, ingresado apenas hacía dos minutos, desvió un remate y marcó en propia puerta. Un autogol que salvó al Tottenham y desmoronó el sueño del Bodo.

Hauge hizo soñar a los fans del Bodø | AP

¿Era merecido el posible triunfo noriego?

El Bodø había puesto todo sobre la mesa. En la primera mitad no fracturó al visitante, pero mantuvo la intensidad. En el complemento encontró su momento: en el minuto 53, Jens Petter Hauge abrió el marcador con un toque preciso tras asistencia de Håkon Evjen. El equipo creció con el gol. Luego el Tottenham quiso reaccionar; un tanto de Rodrigo Bentancur fue anulado por una falta previa de Micky van de Ven. Eso no logró frenar al local.

Y llegó el 2-0 en el minuto 67: un error en la salida de los Spurs permitió que Evjen hallara de nuevo a Hauge, quien sorteó defensas y definió con zurda. Bodo estaba cerca de su primera victoria europea en casa. Hasta ese momento, parecía que la balanza se inclinaba con justicia hacia ellos. La ilusión rugía con cada ataque, con cada remate al larguero.

Duelo cerrado en patio noruego | AP

Pero Tottenham, en su desesperación, también hizo lo suyo. En el 69 recortó distancia con un cabezazo de Van de Ven tras centro de Pedro Porro. Y hubo más: un disparo de Wilson Odobert pegó en el palo en el 84, y otro esfuerzo de Andreas Helmersen se estrelló en el larguero. Era una noche de oportunidades desperdiciadas.

Cierre de alarido en Noruega

Y entonces vino el desenlace: minuto 89, el Tottenham apuraba para buscar algo más. Kevin Danso dispara, Halkin lo tapa con el pie, Gundersen y Richarlison van al rebote y el balón golpea al primero, entra. Autogol y empate. Un golpe al corazón del Bodo.

Danso fue de los jugadores más participativos | AP

La decepción en las caras del equipo noruego lo decía todo: habían jugado con ambición, dominado fases, fallando incluso un penalti (Kasper Høgh lo mandó por encima del travesaño), y estuvieron tan cerca. La rivalidad emocional contra Tottenham se alimentaba de esa frustración.

Tottenham, por su parte, exhibió una resiliencia que suele tener en noches bravas. No fue una actuación brillante, pero sí con carácter: resistir, esperar su momento y aprovechar el error del rival. Thomas Frank lo resumió en sus declaraciones: destacó el carácter de su plantel ante la adversidad.

van de Ven metió al partido a los Spurs | AP