Lo que parecía una nueva oportunidad para Guillermo Ochoa en el futbol europeo se ha convertido en un arranque lleno de pesadillas. El histórico arquero mexicano atraviesa un duro momento con el AEL Limassol de Chipre, donde ha recibido 12 goles en apenas cuatro partidos, lo que ha encendido las alarmas sobre su futuro inmediato.

Un inicio de terror en el futbol chipriota
Ochoa, quien llegó al AEL Limassol como refuerzo estrella tras su salida del Salernitana, no ha logrado consolidarse bajo los tres palos. En su debut, su equipo fue goleado 5-0 por Omonia, resultado que marcó el inicio de una racha negativa para el conjunto amarillo.
El mal paso del portero mexicano se refleja en los marcadores. El AEL ha caído 5-0 ante Omonia, perdió 2-0 frente a Akritas Chlorakas, venció 4-1 a Anortosis y volvió a caer estrepitosamente 4-0 contra Aris Limassol. Cuatro partidos, tres derrotas y apenas una victoria dejan en evidencia un rendimiento preocupante.

AEL Limassol, en riesgo de descenso
Con estos resultados, el AEL Limassol se ubica en la décima posición de la Primera División de Chipre, apenas dos lugares por encima de los puestos de descenso. En este torneo, los últimos tres equipos pierden la categoría, lo que complica el panorama para Ochoa y compañía.

¿Se despide del Mundial de 2026?
El mal momento de Ochoa llega justo cuando la conversación sobre los porteros de la Selección Mexicana para el Mundial de 2026 está más abierta que nunca. Aunque ni Luis Ángel Malagón ni Raúl 'Tala' Rangel atraviesan su mejor etapa, el nombre del veterano guardameta parece cada vez más lejos de las opciones de Javier Aguirre.
Ochoa, quien ha disputado cinco Copas del Mundo desde Alemania 2006, podría haber jugado su último torneo con el Tri en la Copa Oro. Su experiencia y liderazgo ya no parecen suficientes para ganarse un puesto en la próxima justa mundialista, especialmente si su rendimiento en Chipre no mejora pronto.
Un legado que se apaga lentamente
El paso de Guillermo Ochoa por Europa ha estado lleno de altibajos, con etapas brillantes en clubes como el Ajaccio o el Standard de Lieja, pero también con experiencias complicadas en equipos que pelean por la permanencia. Su aventura en Chipre, por ahora, parece ser una de las más difíciles de su carrera.





