Horas después de que Paramount y UFC anunciaran un acuerdo de derechos por mil millones de dólares, Dana White dijo que aún no había escuchado de su amigo, el presidente Donald Trump, sus pensamientos sobre el nuevo hogar de transmisión de la compañía de lucha.
A White le pareció bien. El director ejecutivo de la UFC tenía previsto viajar a Washington el 28 de agosto para reunirse con Trump y su hija, Ivanka, para ponerse al día y hablar sobre la logística de la cartelera propuesta para el 4 de julio del próximo año en la Casa Blanca.

Trump dijo el mes pasado que quería organizar un partido de la UFC en la Casa Blanca con más de 20.000 espectadores para celebrar los 250 años de independencia estadounidense.
"Sin duda va a suceder. Piénsenlo: en el 250.º aniversario de los Estados Unidos de América, la UFC se transmitirá en vivo por CBS desde el jardín sur de la Casa Blanca", comentó para AP Dana White
La idea de peleas en jaula en la Casa Blanca habría parecido improbable cuando los hermanos Fertitta compraron UFC por 2 millones de dólares en 2001 y pusieron a White a cargo de la incipiente promoción de peleas.





