La edición 2025 del Red Bull Rampage dejó imágenes impactantes y momentos de gran tensión en el mundo del ciclismo extremo. Aunque el evento se caracteriza por su espectacularidad y alto nivel técnico, esta vez las caídas fueron protagonistas, especialmente la del español Adolf Silva, quien sufrió un aparatoso accidente en el desierto de Virgin, Utah.

¿Cómo fue el accidente?
El deportista ibérico, reconocido por su estilo arriesgado y su historial de acrobacias imposibles, participaba en la segunda ronda del certamen cuando intentó ejecutar un step-down double backflip, una de las maniobras más difíciles del freeride mundial. Sin embargo, no logró completar la segunda rotación y terminó impactando de forma brutal contra el suelo, golpeándose gravemente en la cabeza y el cuello.
El momento generó preocupación inmediata entre los asistentes y los millones de espectadores que seguían la competencia a través de la retransmisión oficial. Silva permaneció inmóvil durante varios segundos, lo que llevó a detener la competencia mientras ingresaban los equipos médicos de emergencia.
Adolf Silva Crash pic.twitter.com/GkCEWwiA2s
— MXG (@MXGRyan) October 19, 2025
¿Cuál es su estado actual?
Afortunadamente, poco después Red Bull confirmó que Adolf Silva estaba consciente, estable y en comunicación con su familia, lo que llevó alivio a los fanáticos y al gremio del ciclismo extremo. Aunque se mantiene en observación médica, su estado no representa un riesgo vital, de acuerdo con los primeros reportes oficiales del evento.
Hasta el momento, se desconoce el alcance exacto de las lesiones que sufrió el ciclista español. No obstante, el impacto fue tan fuerte que varios especialistas han destacado la importancia del equipo de protección y de las medidas de seguridad aplicadas en este tipo de competencias, donde cada maniobra implica un riesgo elevado.

El Red Bull Rampage 2025 ha sido uno de los más intensos de los últimos años. Además del accidente de Silva, el evento registró otra caída preocupante, esta vez protagonizada por el sueco Emil Johansson, quien perdió el control en una sección técnica y tuvo que ser evacuado en helicóptero tras precipitarse por un acantilado.
Ambos incidentes han reabierto el debate sobre los límites del riesgo en el ciclismo de montaña extremo, una disciplina donde la búsqueda de la perfección y la innovación técnica a menudo se enfrenta a la delgada línea de la seguridad. Los organizadores aseguraron que seguirán reforzando los protocolos para proteger a los atletas sin restarle espectacularidad al evento.





