La historia de Jesús Carreón ha conmovido e inspirado a miles de personas en México y Estados Unidos. El joven tijuanense, que en su infancia vendía dulces en la calle y llegó a dormir en autos junto a su familia, logró graduarse como abogado en la Harvard Law School, una de las universidades más prestigiosas del mundo.

Desde que migró a Estados Unidos a los siete años, Carreón enfrentó pobreza y discriminación, pero nunca renunció a su sueño. “Dormimos en autos o casas prestadas”, recordó sobre su niñez, marcada por carencias extremas. Para ayudar a su familia, trabajó en una tortillería, en restaurantes y hasta cargando letreros en las calles.
Un comercial de televisión sobre Harvard lo inspiró a luchar por un objetivo que parecía imposible. “En mi vida recibí más rechazos que aceptaciones, pero cada ‘sí’ valió la pena”, declaró. Su esfuerzo rindió frutos cuando fue aceptado en Harvard con una beca completa, gracias también al programa DACA, que le permitió estudiar y trabajar legalmente.
Con toga y birrete, Carreón aseguró que su vida actual le parece “un poco absurda” al compararla con sus días sin hogar y sin papeles. Su caso se viralizó en redes sociales como ejemplo de que la perseverancia puede abrir caminos. “Crean en ustedes. Mientras no te des por vencido, todo es posible”, expresó.
Hoy, Jesús Carreón no solo celebra su título en Derecho, sino que también abre la puerta a nuevas generaciones de migrantes que buscan cumplir el “sueño americano”.





