Con la llegada de 2026, muchos adultos mayores se preguntan si deben renovar la credencial del INAPAM para continuar accediendo a descuentos en transporte, servicios, alimentos y programas sociales. La Secretaría del Bienestar ha aclarado que la mayoría de credenciales son permanentes, pero hay excepciones que requieren trámite de reposición o actualización.

¿La credencial del INAPAM caduca en 2026?
La credencial del INAPAM no tiene una fecha de vencimiento, por lo que no es necesario renovarla periódicamente solo porque cambia el año o porque fue emitida en versiones anteriores. Todas las credenciales, sin importar el diseño o el año de emisión, siguen siendo válidas siempre que se puedan identificar claramente los datos del titular.
Esto significa que si tu tarjeta está en buen estado y tus datos están legibles, no tendrás que hacer ningún trámite adicional para seguir aprovechando sus beneficios en 2026.

¿Cuándo sí se debe renovar o reponer la credencial?
Aunque la regla general indica que no se requiere renovación anual, hay situaciones específicas en las que sí es obligatorio solicitar una nueva tarjeta. Estos casos son:
Deterioro o daño: cuando la credencial está desgastada o ilegible y ya no permite identificar al titular.
Pérdida o robo: si la tarjeta se ha extraviado o ha sido robada, será necesario tramitar una reposición.
Cambio de datos personales: si hubo modificaciones en nombre, domicilio u otra información relevante, hay que actualizar la tarjeta.
Tarjetas antiguas del INSEN: las credenciales antiguas emitidas por el Instituto Nacional de la Senectud (INSEN) ya no son válidas para acceder a beneficios y deben cambiarse por la versión actual del INAPAM.
Estos requisitos aseguran que la identificación sea clara y útil tanto para los adultos mayores como para las instituciones que brindan apoyos vinculados a la credencial.

¿Cómo tramitar la renovación o reposición?
La reposición o actualización de la credencial se realiza de forma presencial en los módulos autorizados de la Secretaría del Bienestar en cada entidad de México, y no tiene costo.
Los documentos que normalmente se solicitan son:
Acta de nacimiento legible (para comprobar que la persona tiene 60 años o más).
Identificación oficial vigente con fotografía (como INE, pasaporte o cédula profesional).
CURP actualizada.
Comprobante de domicilio reciente (no mayor a seis meses).
Fotografía tamaño infantil reciente (en algunos lugares se toma ahí mismo).

Si todos los documentos están completos, en muchos módulos la nueva credencial puede emitirse el mismo día del trámite.




