El Real Madrid inicia una temporada cargada de expectativas con un doble estreno: juega en el renovado Santiago Bernabéu y bajo la dirección de su nuevo técnico, Xabi Alonso. El rival será Osasuna, en el arranque de LaLiga 2025-2026, un partido que representa mucho más que el simple debut del curso para los blancos.
Los merengues llegan con la presión de recuperar la grandeza perdida tras un año sin títulos y con un segundo puesto que marcó el adiós de Carlo Ancelotti. Alonso tiene la misión de devolver al club a lo más alto de España y Europa, respaldado por una plantilla en la que brillan figuras como Kylian Mbappé y Vinícius Jr., llamados a liderar la ofensiva madridista.
La pretemporada dejó señales alentadoras, en especial la goleada 4-0 al Tirol austriaco, con doblete de Mbappé y goles de Militao y Rodrygo. Aunque fue una preparación corta, la ilusión se respira en el ambiente, reforzada por la expectativa de ver cómo Alonso imprime su estilo en el equipo desde el primer día.
Osasuna, por su parte, llega con menos certezas. Bajo el mando de Alessio Lisci, terminó noveno la pasada campaña y mostró irregularidad en los amistosos previos. Pese a que sueña con dar la sorpresa en el Bernabéu, la historia no lo favorece: no vence al Madrid en la capital desde 2004.




