Las Eliminatorias de la Conmebol rumbo al Mundial 2026 ofrecen un capítulo especial en el Estadio Municipal de El Alto, donde Bolivia se aferra a la esperanza de alcanzar el Repechaje frente a una Brasil ya clasificada. Aunque en apariencia el partido luce desigual, la necesidad y la ilusión convierten este choque en un duelo cargado de tensión y dramatismo.
El panorama para la selección boliviana no es sencillo: ganar es una obligación, pero no suficiente. La Verde depende también del resultado entre Venezuela y Colombia para mantener vivo su sueño mundialista. La afición boliviana sabe que el margen de error es mínimo, y por eso espera que el equipo entregue su mejor versión en uno de los encuentros más importantes de los últimos años.
En contraste, la escuadra brasileña, dirigida por Carlo Ancelotti, llega sin presión alguna. Con el boleto al Mundial 2026 asegurado, la Canarinha podría tomarse el partido como un trámite. Sin embargo, la historia marca otra cosa: Brasil suele imponerse con autoridad en este tipo de duelos, y la posibilidad de aguarle la fiesta a Bolivia podría ser un incentivo suficiente para salir a ganar. No hay que olvidar que en su última visita en Eliminatorias, Brasil aplastó 4-0 a los locales.
El historial también juega en contra de los bolivianos. En 33 enfrentamientos oficiales, la Verde apenas ha logrado cinco victorias frente a 24 celebraciones brasileñas y cuatro empates. Pese a ello, la altura de El Alto y la necesidad de triunfo alimentan la esperanza de que Bolivia logre su sexto festejo histórico, uno que, en esta ocasión, tendría el valor de medio boleto a la Copa del Mundo.




