Desde el tórrido inicio de Jalen Brunson hasta los cánticos de “¡Knicks en 7!, ésta fue la noche de Nueva York. Quizá todavía pueda ser la serie de los Knicks.
Jalen Brunson anotó 32 puntos, Karl-Anthony Towns sumó 24 unidades y 13 rebotes a pesar de una contusión en la rodilla izquierda, y los Knicks sobrevivieron en la Final de la Conferencia Este, al vencer el jueves a los Pacers de Indiana por 111-94 en el quinto partido.
Los Knicks ganaron en su cancha por primera vez en la serie e impidieron que los Pacers reservaran su segundo viaje a las Finales de la NBA en la historia de la franquicia. Indiana lo intentará de nuevo el sábado por la noche en casa.
Nueva York extendió su primera aventura en las Finales de conferencia desde 2000 y mantuvo vivas las esperanzas de ser el 14º equipo en remontar un déficit de 3-1 para ganar una serie. Ningún conjunto ha ganado una serie de Finales de Conferencia después de perder los dos primeros duelos en casa.
Dos noches después de ceder 43 puntos en el primer cuarto, los Knicks limitaron a los Pacers a sólo 45 en la primera mitad y controlaron a Tyrese Haliburton, quien había contabilizado 32 unidades, 15 asistencias y 12 rebotes el martes. Esta vez, consiguió apenas ocho puntos y seis asistencias.
Brunson, superado por su base rival el martes, se recuperó con su vigésimo primer encuentro de postemporada con 30 o más puntos, un récord de la franquicia con los Knicks.
Bennedict Mathurin anotó 23 puntos desde el banquillo por los Pacers, que habían ganado seis partidos consecutivos como visitantes. Indiana acertó apenas un 40,5% de sus disparos de campo. Fue su partido de menor puntuación de la postemporada.
Towns, quien estaba en duda para jugar después de lastimarse la rodilla izquierda en una colisión al final del cuarto partido, tomó la estafeta con 12 puntos en el segundo cuarto, cuando Brunson no anotó.
