SALVADOR RODRíGUEZ
Juan Manuel Márquez aceptó que de poco le sirvió el triunfo ante el colombiano Likar Ramos en un round, pues no se cumplió el objetivo que buscaba de entrar en ritmo, aunque sí le dejó ver qué tal anda su pegada en un peso superior, tomando en cuenta que su próximo pleito ante el tagalo Manny Pacquiao será en 144 libras.
Luego del triunfo ante Ramos por la vía del cloroformo en apenas un round, el ‘Dinamita’ se dijo contento por el final del combate pese a que esperaba un poco más del ex Campeón Mundial Superpluma; sin embargo, evitó un susto (lesión o corte) que pusiera en riesgo su esperada tercera reyerta ante el filipino.
"Digamos que no me metí mucho en ritmo, siempre es importante ganar y pues lo conecté con esa derecha y fue todo, le pegué muy bien”, dijo el ex Campeón Pluma, Superpluma y actual rey Ligero al bajar del ring en la Plaza de Toros de Cancún.
"Con Pacquiao será diferente, hay que prepararse más fuerte, ya sabemos lo que nos viene, así que me voy a preparar con todo, espero que él se prepare porque yo voy a salir por todo”, agregó Márquez Méndez, quien regresó por la puerta grande a México, tras 17 años de ausencia.
"Voy a descansar unos 15 días, era importante tener esta pelea para mantenerse activos, no es lo mismo estar en el gimnasio que en el ring con un adversario peligroso, por fortuna lo acabamos rápido y ahora voy a la pelea de mi vida”, concluyó el ‘Dinamita’, quien por primera vez fue acompañado en la arena por sus hijos Aldo, Juan y Allison, así como por su esposa Erika.
Nacho Beristáin, entrenador de Juan Manuel, estuvo satisfecho con el resultado, pues sabía que Ramos no sería una copia de lo que pasará ante Pacquiao, pero el final corto le evitó de algún susto que pusiera en riesgo esa pelea.
