Las eliminatorias europeas rumbo al Mundial 2026 aterrizan en el Ullevaal Stadion de Oslo con un enfrentamiento que podría definir el destino del Grupo I. Noruega recibe a Israel en un choque en el que los nórdicos buscan dar un paso casi definitivo hacia la clasificación directa.
El contexto motiva interés: Noruega llega en racha perfecta, con victorias en todas sus jornadas, mientras Israel transita por una fase más irregular y necesita recomponerse para mantener vivas sus aspiraciones. Las miradas estarán puestas en cómo responde el equipo israelí frente a un rival que crece con cada partido. Al mismo tiempo, la tensión política y de seguridad rodea el partido, sobre todo con manifestaciones previstas que pondrán especial atención en el dispositivo fuera y dentro del estadio.
Este duelo no solo es deportivo: tiene carga simbólica, política y estructural. La federación noruega se pronunció con un comunicado sobre el contexto internacional previo al partido, mientras que Israel encara críticas y presiones en torno a su presencia en el torneo.
El momento de Noruega y el reto israelí
Noruega ha transformado estas eliminatorias en una exhibición de poder ofensivo. Sus resultados demuestran capacidad goleadora: destacan el 11-1 ante Moldavia —donde Erling Haaland marcó cinco goles—, así como victorias contundentes contra Italia, Estonia y el propio Israel.
Al momento, los escandinavos lideran el Grupo I con 15 puntos, sumando victorias en todas las jornadas disputadas.
Israel, por su parte, ha dado muestras de solidez ofensiva en varios partidos, pero también ha exhibido flancos débiles que han sido explotados por rivales más potentes. En su más reciente derrota clave cayó 4-5 ante Italia, y frente a Noruega ya sucumbió 2-4 en un duelo previo. Para aspirar siquiera al Repechaje, Israel necesita reforzar su estructura defensiva y ajustar su consistencia mental en partidos de alta presión.
Históricamente, los enfrentamientos directos entre ambos han sido escasos: apenas tres partidos, con triunfos de Noruega en dos ocasiones (incluida una fase de clasificación reciente) y una victoria de Israel en un amistoso lejano de 1972.
