Este jueves 23 de enero las calles de Culiacán, Sinaloa fueron tomadas por miles de personas que vestidas de blanco salieron a las calles para exigir paz y también la salida del gobernador Rubén Rocha Moya, a propósito del reciente asesinato de dos niños y su papá víctimas de la narco violencia que se desató desde hace cuatro meses en todo el estado.

Al grito de “¡Fuera Rocha!” y “¡Los niños no se toca!” fue como avanzaron los sinaloenses de todas las edades por diferentes calles de Culiacán, llevando mantas de protestas y globos blancos que mandaron al cielo como un homenaje a Alexander (9 años) y Gael (12 años), quienes junto a su padre Jesús fallecieron después de que el pasado fin de semana fueron atacados a balazos cuando intentaron robarles el auto familiar en un estacionamiento.
Esta triste situación generó indignación en la población de Sinaloa, que este jueves organizó una marcha para exigir paz, llegando incluso hasta el Palacio de Gobierno al cual decenas de manifestantes ingresaron por la fuerza rompiendo puertas y cristales.
Así quedó el despacho del gobernador Rocha Moya, trabajadores de gobierno hacen la limpieza correspondiente. pic.twitter.com/vljvmmOKXg
— Arely Hernandez (@arehc) January 23, 2025
Era tal el enojo de la población que llegaron hasta el despacho del gobernador Rocha Moya para exigirle que renuncie al puesto por su incapacidad para poner un alto a la violencia generada por cárteles del narcotráfico. “Ya está cansado el pueblo”, “Usted se burla que no pasa nada”, “Que dé la cara”, eran algunos de los gritos que se escuchaban, mientras trabajadores del Gobierno trataban de controlar a los manifestantes.

El Gobernador Rocha Moya no atendió a los manifestantes, ya que a la misma hora está en una reunión con diputados federales de Morena, encabezados por Ricardo Monreal, quienes mostraron su apoyo al mandatario de Sinaloa.