El Gobierno de la Ciudad de México anunció que todas las unidades de transporte público y concesionado deberán contar con botones de pánico. La medida forma parte de la estrategia “Ruta Libre de Violencia contra las Mujeres” implementada por la jefa de Gobierno, Clara Brugada, con el objetivo de responder de inmediato ante casos de acoso o abuso sexual.
“Lo mínimo que debe de tener cada unidad es un botón de pánico… si alguien comete un abuso sexual al interior del transporte público, el chofer deberá presionarlo para que llegue una patrulla y pueda bajar a la persona que cometió el delito”, dijo Brugada durante un evento en el CETRAM Chapultepec.

Los dispositivos permitirán a los operadores alertar de forma directa a las autoridades, para que se despliegue una patrulla y se actúe de manera inmediata. Brugada insistió en que esta es solo la primera de 15 acciones que integran un nuevo protocolo integral contra la violencia sexual en el transporte.
“No es normal tener miedo al subir al transporte”
A pesar de que las cifras muestran una reducción en la percepción de violencia, al pasar del 87% en 2019 al 75% en 2025, la mandataria subrayó que aún es una problemática grave.

“Todavía es muy grave la cantidad de mujeres que dice haber sentido violencia cuando se sube al transporte público”, afirmó Brugada. Y añadió: “No es normal que una mujer suba al transporte con miedo a ser acosada… nada de eso es normal. Todo eso es violencia”.
La funcionaria pidió el compromiso de operadores, auxiliares y concesionarios para garantizar la protección de las pasajeras. También recordó que el transporte de la capital deberá estar preparado para recibir a miles de visitantes durante el Mundial 2026.

“Tenemos que prepararnos para que sepan que, si llegan a la Ciudad de México, el transporte concesionado va a ser una ruta libre de violencia”, apuntó.
Las 15 acciones de la “Ruta Libre de Violencia”
La estrategia incluye desde la colocación de señalética institucional hasta capacitaciones en derechos humanos, instalación de módulos de atención, iluminación, limpieza, uso obligatorio de GPS, incorporación de mujeres operadoras y vigilancia constante para evaluar el cumplimiento. Entre ellas, destaca:

- Botón de pánico obligatorio en todas las unidades.
- Campañas de difusión permanentes como “Si te tocan, nos toca”.
- Protocolo de actuación inmediata para casos de abuso.
- Iluminación y señalización adecuada en unidades y entornos.
- Módulos de atención integral en CETRAM.
Las verificaciones serán mensuales y estarán a cargo de autoridades locales. La meta es clara: un transporte público seguro, con reacción inmediata y sin miedo para las mujeres de la CDMX.





