El ciclo de Javier Aquino estaba cerrado para Tigres, para el cuerpo técnico que encabeza Guido Pizarro y para la directiva de Mauricio Culebro. Sin embargo, el jugador deseaba seguir percibiendo salario sin dejar de vivir en Monterrey, por eso se queja después de que no lo aceptaron.

Sin embargo, el club felino le hizo una propuesta en la última charla que tuvieron: si decidía retirarse ya, lo registrarían para el torneo que está por comenzar, para que en el primer partido como locales en el Clausura 26, el 14 de enero ante Pumas, jugara y se despidiera del Volcán como un histórico de una década y 5 títulos de Liga MX.
Además, serviría como marco para incluirlo en el Anillo de Leyendas en el Estadio Universitario, un reconocimiento que Tigres otorga a aquellos jugadores que han trascendido en la historia del club, con legado imborrable, a quienes han contribuido de manera significativa a los éxitos del equipo de la UANL y CEMEX.

ACUSÓ “MIGAJAS” DE LOS FELINOS
Sin embargo, Aquino lo rechazó. Javier quería contrato del torneo completo, para seguir percibiendo un sueldo alto de futbolista en activo, aunque ya no tiene cabida en el proyecto felino que busca La Novena.
En su emotivo mensaje en redes sociales, incluso calificó la propuesta de despedirlo como leyenda como “migajas”, pues está aferrado a no perder aún un salario y seguir viviendo en Monterrey.
Ahora, Aquino empezará a buscar opciones de clubes, pues no plantea retirarse aún, para seguir en activo en 2026 a sus 36 años de edad, un histórico de nuestro futbol que todavía se aferra a la cancha y a un salario.





