Vaya momento se vivió en el duelo de la Ronda Divisional sobre el emparrillado del Highmark Stadium entre los Baltimore Ravens y Buffalo Bills.
Y es que, Josh Allen acaparó los reflectores con el reloj en 1:45 para finalizar el primer cuarto y enfrentaban un segundo y 16 desde su línea de las 47 yardas.
El quarterback de los Bills mandó la señal de una manera poco factible que ni sus propios compañeros entendieron para ejecutar la jugada: “Deadpool, Deadpool, Deadpool”.
El gritó con la clave no terminó por maniobrar donde al parecer intentaba cambiar a un mariscal de campo, momento que fue frenado por Kyle Van Noy y Nnamdi Madubuike lo embistieron.
Waiting on the Wolverine audible #BALvsBUF@VanCityReynolds | @JoshAllenQB pic.twitter.com/6XBMw59yE7
— NFL (@NFL) January 20, 2025
Finalmente, Buffalo terminó por despejar el ovoide en dos jugadas después, aunque volvió de su lado tras la pérdida del rival y ejecutaron el touchdown.
La seña al parecer no terminó por perjudicar al equipo local y Allen terminó por olvidar los enigmáticos gritos en el juego.
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