MITO: Uno perdió la identidad y el otro busca definirse
REALIDAD: América vive a la deriva, en el deseo de mejorar de un día para otro por obra de la casualidad; Chivas sueña con un ideal que está lejos de conseguir, muy romántico y con poca credibilidad.
Vamos a analizar las actualidades de los equipos.
Chivas con JJ Macías busca encontrar la referencia, el jugador que le de presencia de área, el tipo que canalice la tenencia del balón, porque el Rebaño en ocho juegos logró posesionarse del balón mas tiempo que el rival, con un promedio de 58.3% de tenencia del esférico.
En la idea de Marcelo Michel Leaño la posesión del balón es fundamental y la elaboración de las jugadas también, en el torneo el Guadalajara suma 4036 pases en nueve juegos, mientras que los rivales apenas han logrado 2631, tiene más tiempo la pelota y también intentan más pases, dos premisas del técnico que se cumplen.
El problema lo vive cuando no tiene la pelota, en nueve juegos, le generaron 94 tiros a gol, 34 a portería y recibió 14 goles, es aquí donde se nota la fragilidad defensiva, el rival con menos le genera opciones de gol y necesita crear un mayor número de opciones para marcar. La buena noticia es que JJ Macías viene de menos a más, ya marcó gol, comienza a involucrarse en la construcción y funciona como referencia en el ataque, bastantes buenas noticias.
América sigue siendo una incógnita, con Fernando Ortíz sufrió una mutación a un 1-4-4-2 con un solo contención y tres volantes de naturaleza ofensiva.
Aumentó en un 23% los pases con Solari promedió 320 y en el primer juego del Tano logró 393, además creció el porcentaje de pases acertados jugando hacia delante del 77% con Solari al 84% con Ortíz.
El resto de la radiografía nos muestra que no cambió mucho las formas. Con el nuevo entrenador el rival generó más opciones de gol (pasó de 10 a 12, un aumento del 20%), en la creación de jugadas ofensivas se mantuvo igual (29 con el nuevo DT y 27 con el anterior). En los balones perdidos disminuyó pero nada digno de nombrar como cierta mejoría.
CONCLUSIONES: Que difícil es vivir entre el ser y el querer ser, aceptar la realidad que se vive por más triste que sea y buscar el diagnostico adecuado para superar la enfermedad.
América intenta reconstruir su torre de naipes, pero lo hace buscando tiempo para encontrar al nuevo entrenador, apuesta a que sus jugadores retomen su nivel y el equipo logre estabilizarse en los resultados, la tarea primordial del nuevo entrenador es evitar caer a una zona critica que acelere los tiempos de búsqueda.
En cambio las Chivas siguen dándole tiempo al proyecto de Marcelo, sienten que el equipo se acerca al ideal que buscan, pero no se dan cuentan que siguen siendo un equipo bipolar que sufre demasiado sin el balón.
Son dos equipos incompletos, les falta definir su identidad, la diferencia es que Chivas intenta delinearla y las Águilas tienen extraviado su ADN. Los dos todavía están lejos de lo que deben ser.






