Gilberto Mora comenzó a destacar en el futbol desde muy pequeño, cuando formaba parte de las fuerzas básicas de los Jaguares de Chiapas. Con menos de cinco años, el ahora seleccionado mexicano Sub-20 sobresalía ante rivales mayores, lo que llamó la atención de entrenadores y aficionados en Tuxtla Gutiérrez.
Gerardo Márquez, su primer entrenador en el club chiapaneco, recuerda cómo fue aceptado desde el primer día. “Decíamos: ‘¿Cómo no vamos a aceptar al hijo del jefe?’”, comentó entre risas. “Desde muy pequeño sobresalía realmente; con menos de cinco años ya destacaba sobre alumnos más grandes que él”. Desde entonces, Mora se convirtió en una figura recurrente en las actividades del club.
Durante los entretiempos de los partidos del primer equipo, la academia organizaba partidos cortos en la cancha del Estadio Víctor Manuel Reyna. Mora, pese a pertenecer a la categoría Sub-5, acaparaba la atención de la tribuna con sus goles y regates. “Cuando veíamos que estaba solo Morita, gritábamos: ‘¡Pásensela a Morita!’. Y empezaba su show: se llevaba a dos o tres, tocaba, se apoyaba o definía”, explicó Márquez.
En 2015, Ramsés Orantes tomó al equipo donde jugaba Mora y también fue testigo de su talento. “Si el partido estaba aburrido, quien lo encendía era Gilito. La agarraba y toda la afición empezaba a ovacionar. Gil era un fenómeno; jugaba contra los más grandes y no le podían quitar el balón”, relató el entrenador. Fue en esa etapa cuando recibió el apodo de 'El Bombero', por su capacidad para cambiar el rumbo de los encuentros.
¿Cómo nació 'El Bombero'?
“Nos ayudaba a meter goles, salvaba al equipo; era nuestro bombero. A pesar de que era más chico que los demás, siempre sobresalía”, recordó Márquez. Antes de que Mora subiera de categoría, el técnico advirtió a Orantes: “Mira, este chico te va a salvar; es tu bombero, así que cuídalo”. La predicción se cumplió rápidamente.
Su cambio a Xolos
Márquez conserva registros de partidos y evaluaciones realizadas en 2013, donde Mora recibía calificaciones de al menos 35 puntos sobre 40 en criterios técnicos, tácticos, físicos y mentales. Además, destacaba por su manejo con ambos perfiles. Permaneció dos años en la academia, hasta que en 2015 su familia se mudó a Tijuana tras una propuesta laboral para su padre en la Sub-17 de Xolos.
Hoy, con 16 años, Gilberto Mora es una de las figuras de la Selección Mexicana Sub-20. En Chiapas lo recuerdan como un niño talentoso, disciplinado y humilde, que desde pequeño mostró cualidades excepcionales con el balón. Su apodo, 'El Bombero', nació en esas primeras canchas donde siempre aparecía para marcar la diferencia.
