¿De qué falleció Frank Gehry? Fue el genio que reinventó la arquitectura moderna

El canadiense era uno de los arquitectos más reconocidos internacionalmente.
El canadiense era uno de los arquitectos más reconocidos internacionalmente. | Redes Sociales

El mundo de la arquitectura despide a uno de sus más grandes exponentes. Frank Gehry, el revolucionario arquitecto canadiense que transformó la forma de concebir los espacios urbanos, falleció a los 96 años en su casa de Santa Mónica, tras una breve enfermedad respiratoria, según confirmó un portavoz de Gehry Partners.

Gehry, nacido en Toronto, Canadá, estudió arquitectura en la Universidad del Sur de California y más tarde planificación urbana en Harvard. En 1962, fundó su firma en Los Ángeles, donde comenzó a construir su propio lenguaje visual a partir de materiales poco convencionales. 

Guggenheim de Bilbao, fue una de las obras más importantes de Frank Gehry / Especial
Guggenheim de Bilbao, fue una de las obras más importantes de Frank Gehry / Especial

En 1978, su carrera despegó tras la remodelación de su propia casa: “Compramos este pequeño bungalow en Santa Mónica y por como 50 mil dólares, construí una casa alrededor de él”, contó en una charla TED en 2008. “Y algunas personas se entusiasmaron con eso”.

Del bungalow a Bilbao: un genio sin moldes

Aunque en 1989 recibió el codiciado Premio Pritzker, fue a los 60 años cuando llegó su proyecto más célebre: el Museo Guggenheim de Bilbao, una obra que revolucionó el diseño contemporáneo. El edificio, revestido de titanio, se convirtió en un fenómeno cultural. “El mejor arquitecto que tenemos hoy”, dijo emocionado el legendario Philip Johnson en 1998 al recorrer el atrio del museo.

Una enfermedad respiratoria terminó con su vida a los 96 años / Especial
Una enfermedad respiratoria terminó con su vida a los 96 años / Especial

Gehry rompió las reglas del diseño usando software de aviación para modelar sus obras. Vanity Fair describió al Guggenheim como “un gigantesco ramo de peces plateados retorciéndose”. La figura del pez, por cierto, era un símbolo constante en su trabajo. 

“Si tienes que retroceder, ¿por qué no retroceder 300 millones de años antes que el hombre, para pescar?”, explicó en entrevista con Vanity Fair. “Y fue entonces cuando empecé con este pez, como pienso en él, y comencé a dibujar las malditas cosas, y me di cuenta de que eran arquitectónicos”.

Sus obras están en todas partes del mundo / Redes Sociales
Sus obras están en todas partes del mundo / Redes Sociales

Un legado global y personal

Además del Guggenheim, diseñó el Walt Disney Concert Hall en Los Ángeles (2003), la Fundación Louis Vuitton en París (2014) y el Museo de la Cultura Pop en Seattle (2000), entre muchos otros. En 2016 recibió la Medalla Presidencial de la Libertad de Barack Obama.

Colaboradores, colegas y líderes mundiales despidieron al artista con palabras llenas de afecto. Bernard Arnault, presidente de LVMH, declaró: “Le debo una de las asociaciones creativas más largas, intensas y ambiciosas que he tenido el privilegio de experimentar. Él seguirá siendo un genio de la ligereza, la transparencia y la gracia”.

Sus diseños metálicos fueron un sello que le dieron fama / Redes Sociales
Sus diseños metálicos fueron un sello que le dieron fama / Redes Sociales

Por su parte, Nancy Pelosi, expresidenta de la Cámara de Representantes, lo llamó “un caballero titán de la arquitectura y un maestro comunicador del futuro”, y añadió: “Frank dejó una marca indeleble en su amado Los Ángeles, en California, en todo Estados Unidos y, de hecho, en todo el mundo”.

En vida, Gehry rechazó las etiquetas y se mantuvo fiel a su visión: “¿No me vas a llamar un maldito ‘starchitect’? Odio eso”, dijo alguna vez. En realidad, ya era mucho más que eso.

El mundo de la arquitectura está de luto / Redes Sociales
El mundo de la arquitectura está de luto / Redes Sociales