El Santiago Bernabéu vivió una tarde histórica con el duelo entre los Miami Dolphins y los Washington Commanders, pero no solo por el cerrado triunfo 16-13 en tiempo extra, sino porque en pleno corazón de Madrid se vivió uno de los momentos más icónicos de la cultura deportiva estadounidense. Con el partido empatado 13-13 tras el touchdown de Miami, el estadio estalló cuando comenzó a sonar “Sweet Caroline”, el clásico de Neil Diamond que es ya una tradición en distintos eventos deportivos en Estados Unidos.
El público, con una mezcla de aficionados españoles, turistas y seguidores fieles de la NFL, se puso de pie para corear el icónico “so good, so good, so good”, convirtiendo el Bernabéu en una auténtica postal ‘made in America’. Fue el instante que mejor reflejó cómo la liga consiguió transportar por completo su identidad y su show al mayor templo futbolístico de Madrid.
Un espectáculo a la americana en territorio blanco
La atmósfera se transformó desde el primer momento, con música, ruido, animación y un ambiente que mezcló el futbol americano con la euforia europea. Y como si la fiesta cultural no fuera suficiente, el duelo terminó por regalar momentos inesperados e inolvidables: Jack Jones, esquinero de los Dolphins, imitó el festejo “Siuuuu” de Cristiano Ronaldo tras una intercepción en el tiempo extra, arrancando una ola de gritos y celulares en alto entre los aficionados madridistas que presenciaron el gesto.
No fue el único homenaje al ídolo portugués. Cuando Jason Patterson conectó el gol de campo de 29 yardas que selló la victoria de Miami, él mismo celebró también con el “Siu”, un guiño inevitable al estadio que alguna vez vio brillar al ‘7’ del Real Madrid. En redes sociales, el equipo publicó las reacciones de sus jugadores, entre ellas el festejo flamenco de Ollie Gordon II, quien se unió al espíritu español de la noche.
Un partido caliente y una victoria histórica para los Dolphins
Deportivamente, el encuentro fue cerrado y tenso durante los cuatro cuartos. Washington fue “local” en el Bernabéu, pero no pudo capitalizar la ventaja emocional. Tras una intercepción en la primera jugada del tiempo extra, Miami recuperó el balón y lo transformó en el gol de campo decisivo que silenció a los Commanders y puso a bailar a los aficionados de los Dolphins.
El triunfo no solo significó la cuarta victoria de la temporada para Miami y su segunda consecutiva, sino que llegó en un escenario sin precedentes: el primer partido oficial de NFL disputado en España y parte de la gira internacional que este año pasó por Inglaterra, Brasil, Irlanda, Alemania y, finalmente, Madrid.
El Bernabéu, rendido ante la NFL
La celebración final en el campo donde varios jugadores de los Dolphins repitieron el festejo de Cristiano Ronaldo, fue el cierre perfecto para un espectáculo que combinó cultura, deporte y entretenimiento como solo la NFL sabe hacerlo. Pero el momento que quedará en la memoria colectiva fue ese coro masivo de “Sweet Caroline” resonando en un estadio que, por unos segundos, dejó de ser la casa del Real Madrid para convertirse en un auténtico coliseo estadounidense.
En un día que mezcló intercepciones, field goals, festejos virales y música icónica, quedó claro que la NFL no solo ganó un partido: conquistó Madrid.
