La temporada de pesadilla para Manchester United podría tener un capítulo más dentro de los siguientes días, todo esto debido a la posibilidad de perder a su capitán Bruno Fernandes debido al interés del Al-Hilal por hacerse de sus servicios, incluso antes del inicio del Mundial de Clubes.
El interés del club saudí viene relacionado con la necesidad de competir de mejor manera en el partido que sostendrán ante Real Madrid, pues estos dos equipos, además de Pachuca y Salzburg, forman parte del Grupo H.

Sin límite de dinero
Uno de los principales problemas que tiene el Manchester United en puerta es que el interés de Al-Hilal por llevarse a Bruno no viene solo, lo acompañan los 'cañonazos' de dinero que tiene preparados la directiva para poder negociar con el portugués. Según el Daily Mail, en dado caso de que el fichaje de Fernandes al futbol árabe se concrete, la cifra rondará los 120 millones de euros, además de lo que se le pagaría en el contrato, 237 millones de euros a lo largo de tres años, siendo esto un acuerdo que se quedaría cercano a triplicar su sueldo semanal con los Red Devils, mismo que es de 250,000 libras.
La necesidad del club saudí por hacerse de los servicios de Fernandes recae en la cercanía que tiene el inicio del Mundial de Clubes, pues Al-Hilal abrirá su grupo enfrentando al Real Madrid de Xabi Alonso el próximo 18 de junio; no obstante, lo que podría volver realidad la transacción es la decisión final de la familia de Bruno, pues el mediocampista ha mencionado en distintas ocasiones que a él no le gustaría salir del club, a menos que ellos lo quieran, pero su familia podría dar el visto bueno para vivir en Arabia, lo que facilitaría el movimiento.

Días clave en Old Trafford
Con información del periodista Ben Jacobs, Al-Hilal siente cerca el arreglo con Bruno luego de una semana de reuniones positivas con el jugador; sin embargo, tras las declaraciones de Fernandes después de la derrota del Manchester United en la Final de la Europa League, el fichaje sigue estando sujeto a la decisión tanto del jugador como de su familia.
"Siempre he sido honesto, si el club cree que es hora de venderme porque quiere sacar tajada, así es el futbol. Estaré aquí hasta que el club me diga que es hora de irme, nunca seré un problema para ellos", declaró.

Ahora, a pesar de que el técnico Ruben Amorim está haciendo lo posible porque su capitán se quede, la presión del club de la Saudi Pro League seguirá, pues esperan obtener una respuesta antes del viernes 6 de junio. Mientras tanto, Al-Hilal también seguirá en la búsqueda de su nuevo entrenador, quien se presume podría estar en la figura de Simone Inzaghi.




