Atlas encendió oficialmente el botón de “restructuración” rumbo al Clausura 2026. Lo que parecía una ventana de ajustes menores terminó convirtiéndose en un movimiento masivo dentro del plantel: Matías Cóccaro, Mauro Manotas, Alonso Ramírez y Carlos Orrantia dejaron de pertenecer a la institución rojinegra.
Limpia en la Academia AGA
La llamada “barredora” llegó después de un ciclo en el que Atlas no logró dar el salto competitivo esperado. Lesiones, bajo rendimiento, falta de regularidad e incluso decisiones administrativas se combinaron para dar paso a una de las limpias más notorias del club en los últimos torneos. La directiva lo hizo oficial mediante una serie de comunicados donde, uno por uno, agradeció la entrega de los futbolistas… pero también dejó claro que el proyecto necesitaba renovarse.
La salida que más ruido generó fue la de Carlos Orrantia, reciente nominado al Premio Puskas de la FIFA por su espectacular gol frente a Querétaro. A pesar de ese momento de brillantez, su participación en el último semestre fue mínima. Para la afición, su adiós simboliza esa paradoja tan propia del fútbol: un gol que da la vuelta al mundo no siempre garantiza continuidad.
¿Cuáles son las bajas del Atlas?
La decisión de Atlas abarca perfiles muy distintos dentro del plantel, desde un canterano con proceso largo hasta un delantero marcado por las lesiones, pasando por un fichaje extranjero que nunca terminó de despegar.
Matías Cóccaro: un ciclo corto y sin mucho protagonismo
El delantero uruguayo llegó con expectativas en enero de este año, pero sus números reflejan una estadía irregular. Disputó 227 minutos en 14 partidos (solamente uno como titular) y marcó un gol. Aunque mostró entrega en cada ingreso, nunca logró consolidarse como opción principal en el ataque. Atlas lo despidió agradeciendo su compromiso durante Clausura 2025, Apertura 2025 y Leagues Cup 2025, pero su salida se veía venir.
Carlos Orrantia: el Puskas que no alcanzó
El lateral mexicano vivió una de las historias más contrastantes del año rojinegro. Mientras su golazo ante Querétaro lo colocó entre los mejores del mundo (incluso mencionado y replicado en redes por cuentas internacionales de fútbol y compilaciones de la FIFA), su aporte en el torneo fue escaso: seis partidos, uno como titular, para un total de 102 minutos.
Aunque su nominación al Puskas (un hecho histórico para cualquier jugador de la Liga MX) lo mantuvo en el radar mediático, en lo deportivo no logró ganar un lugar en el once rojinegro.
Alonso Ramírez: el adiós de un canterano de largo proceso
Quizá la baja más simbólica para la estructura formativa del club. Ramírez llegó a la Academia en 2016, sumó títulos en Fuerzas Básicas y finalmente debutó en Primera División en enero de 2025 ante Cruz Azul. En el semestre acumuló 193 minutos en tres partidos, dos de ellos como titular. Para muchos en fuerzas básicas, su salida representa el cierre de un ciclo que parecía encaminado a más minutos en el futuro inmediato.
Mauro Manotas: una carrera rojinegra opacada por la lesión
El caso más sensible. El delantero colombiano no sumó ni un minuto con el primer equipo en todo 2025 debido a una grave lesión que lo dejó fuera del Clausura y lo limitó al equipo Sub-21 durante el Apertura, donde jugó 443 minutos.
El club confirmó que ambas partes llegaron a un acuerdo para finalizar su contrato antes de tiempo. Manotas había llegado en 2022 y su paso, que prometía goles, terminó marcado por la mala fortuna.
