Luego de las recientes protestas contra la gentrificación que terminaron en caos y odio, la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, afirmó que en la CDMX “no hay espacio para la xenofobia ni la discriminación”, es por eso que se está planeando combatir este problema que afecta a muchas personas.
En tanto, el secretario de Gobierno, César Cravioto, reconoció la presión económica creciente en barrios como Roma, Condesa, Juárez, Cuauhtémoc, Tabacalera y Anzures. Señaló que “cada vez le cuesta más a la gente mantenerse en esas colonias, sobre todo por el precio del suelo, de la renta y de la vivienda”.
Condiciones insostenibles y respuestas legales
En entrevista para el Heraldo Radio, el funcionario capitalino advirtió que el fenómeno debe atenderse sin caer en discursos de odio. “Sí le entramos al tema de la gentrificación, sí discutimos toda la política pública para frenarla, pero no podemos consentir que un tema tan importante se manche con situaciones de ofensa o agresión”, dijo, tras rechazar los actos de violencia registrados en una reciente manifestación.

La marcha, realizada el pasado viernes, incluyó pintas, daños a comercios y expresiones xenófobas contra extranjeros. El secretario advirtió que este tipo de conductas constituyen delitos y no serán toleradas.
Acciones concretas contra el fenómeno inmobiliario
El Gobierno de la Ciudad de México destinará este año un presupuesto histórico de nueve mil millones de pesos a la vivienda social, con unidades habitacionales que costarán alrededor de un millón de pesos por departamento y esquemas de renta asequible, particularmente para jóvenes.

Además, Cravioto recordó dos leyes ya vigentes: una que limita el aumento de rentas a nivel inflacionario, y otra que restringe el uso de plataformas de renta temporal como Airbnb a solo 180 días al año. Ambas serán reforzadas con inspecciones y mecanismos de cumplimiento más estrictos.
Escuchar a los vecinos será clave
Finalmente, Cravioto destacó que el gobierno ya sostuvo una asamblea con 300 habitantes de colonias afectadas como Roma y Condesa. Ahí se recibieron propuestas ciudadanas que serán tomadas en cuenta para el diseño de nuevas estrategias.
“Lo que buscamos es que nadie se sienta expulsado de su propia comunidad”, concluyó el funcionario.





