En una acción que une arte, redención y espíritu navideño, personas privadas de la libertad del Reclusorio Preventivo Varonil Norte elaboraron el árbol monumental de Navidad que ya adorna la Glorieta de Insurgentes en la Ciudad de México.
Se trata de una estructura de acero reforzado de ocho metros de altura, 2.8 metros de ancho y aproximadamente 200 kilogramos de peso, diseñada y ensamblada con técnicas de herrería artística y pintura industrial por cuatro herreros y un pintor internos del penal.

“Me siento muy orgulloso de poder poner mi entusiasmo y mis conocimientos de herrería en este árbol, que allá afuera va a significar mucho, pero para nosotros aquí adentro también tiene muchos significados y nos hace recordar que sí podemos servir a la sociedad haciendo el bien”, compartió Felipe, uno de los participantes.
Gran trabajo desde el Reclusorio Norte
La pieza, que consta de seis niveles, fue trabajada durante un mes en los talleres del centro penitenciario ubicado en la alcaldía Gustavo A. Madero, y simboliza el valor de la vida, la unión familiar, los deseos de libertad, alegría, paz, amor y la búsqueda de segundas oportunidades.

Arturo, otro de los internos encargado de pintar el árbol, expresó: “Me emociona mucho que la gente vea lo que se puede hacer en los talleres de los Centros Penitenciarios y espero que lo reciban con mucho aprecio y lo disfruten”.
Todo listo para Navidad
La instalación del árbol corre a cargo de la Secretaría de Obras y Servicios, mientras que el Sistema de Transporte Colectivo Metro complementará la escena con una villa navideña abierta al público desde el 5 de diciembre de 2025 hasta el 7 de enero de 2026.

Con esta iniciativa, la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y su Subsecretaría del Sistema Penitenciario promueven la reinserción social a través del arte y las tradiciones, destacando que las segundas oportunidades también pueden comenzar con una chispa de Navidad.





