El icónico Reloj Chino, ubicado en la intersección de Bucareli y Artículo 123 en la Ciudad de México, ha sido reactivado después de años sin funcionamiento. La maquinaria fue restaurada por un maestro relojero certificado, en coordinación con la Alcaldía Cuauhtémoc, como parte de un esfuerzo por preservar el patrimonio histórico de la ciudad.

La alcaldesa Alessandra Rojo de la Vega destacó la importancia de esta restauración, señalando que "conservar nuestros monumentos también es proteger la memoria de la ciudad". Aunque el reloj ya está en funcionamiento, se ha programado una intervención integral para garantizar su conservación a largo plazo, bajo criterios técnicos y legales vigentes en materia de patrimonio.
Un símbolo de la relación sino-mexicana
El Reloj Chino, regalo del emperador Puyi por el Centenario de la Independencia de México en 1910, fue instalado en la Plaza de la Ciudadela y destruido en 1913 durante la Decena Trágica. La comunidad chino-mexicana recaudó fondos para su reconstrucción, y fue reinaugurado en 1921 en su ubicación actual.

El reloj simboliza la amistad entre México y China y es un hito en el centro histórico de la capital. En 2010, fue renovado para conmemorar el Bicentenario de la Independencia, destacando la relación intercultural entre ambos países.
La restauración del Reloj Chino destaca la falta de maestros relojeros especializados en relojes monumentales, ya que los dos relojeros de la alcaldía se jubilaron en 2024, lo que ha llevado a contratar especialistas externos para la conservación.
La Alcaldía Cuauhtémoc se compromete a preservar monumentos históricos y planea presentar en los próximos meses planes para su mantenimiento y conservación.





