Durante su participación en la sesión plenaria del Foro Económico de San Petersburgo, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, lanzó una advertencia que encendió las alarmas a nivel internacional: “Me preocupa. Lo digo sin ninguna ironía ni estoy bromeando. Existe un gran potencial de conflicto que está creciendo”.
El mandatario ruso subrayó que estos riesgos no son lejanos: “Sucede en nuestras mismas narices, nos concierne de modo directo, el conflicto que sufrimos en Ucrania, lo que está pasando en Medio Oriente”. Además, expresó su inquietud sobre el programa nuclear iraní: “Nos preocupa mucho lo que ocurre en torno a las instalaciones nucleares de Irán. Nos inquieta adónde pueda llegar esto”.
Rusia apoya a Irán
A pesar de las tensiones actuales en Medio Oriente, Putin aseguró que Rusia no tiene planes de involucrarse militarmente en el conflicto entre Irán e Israel. “Siempre cumplimos nuestras obligaciones y lo mismo se aplica a las relaciones ruso-iraníes. Apoyamos a Irán en la defensa de sus intereses legítimos, incluyendo su lucha por tener energía atómica pacífica”, señaló.

Frente a la posibilidad de una escalada mayor, descartó una intervención militar directa: “¿Qué más podemos hacer? ¿Comenzar algún tipo de operación militar o qué? Tenemos nuestra propia operación militar especial”.
Advierte sobre el uso de armas nucleares
Putin fue tajante ante el posible uso de una “bomba sucia” por parte de Ucrania: “Habría una respuesta muy dura, probablemente catastrófica, no sólo tanto para el régimen neonazi como, por desgracia, para la propia Ucrania”. Aunque admitió que no existen evidencias que apunten a esa amenaza, sostuvo que tales ideas “podrían surgir en alguien con imaginación enferma”.
En ese marco, recordó que la Doctrina Nuclear de Rusia contempla con claridad los escenarios en los que se justificaría el uso de su arsenal atómico.

"Toda Ucrania es nuestra", reitera Putin
Al insistir en su postura expansionista, Putin declaró: “Toda Ucrania es nuestra”, al considerar que “los pueblos ruso y ucranio son un solo pueblo”. Recalcó que no busca la capitulación de Kiev, sino que “se reconozca la realidad creada sobre el terreno”, aludiendo a la anexión de regiones como Donietsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia.
Finalmente, reafirmó la creación de una “zona de seguridad” de hasta 12 kilómetros en la región ucraniana de Sumi y advirtió: “No tenemos el objetivo de tomar la ciudad de Sumi, pero tampoco lo descarto”.





