El futbol salvadoreño vuelve a colocarse en el centro del debate político tras la elección de Yamil Bukele como nuevo presidente de la Federación Salvadoreña de Futbol (FESFUT). El hermano del presidente Nayib Bukele asumirá el cargo para el período 2025–2029, en una votación en la que se presentó como candidato único, reforzando la estrecha relación entre deporte y poder en El Salvador.
La designación se concretó este viernes y marca un nuevo capítulo en la influencia del apellido Bukele dentro de las instituciones del país. Aunque el nombramiento se dio dentro de los marcos estatutarios del futbol local, el hecho no pasó desapercibido por la carga política que representa para el balompié nacional.

Yamil Bukele asume la presidencia de la FESFUT para el periodo 2025–2029
Antes de llegar a la FESFUT, Yamil Bukele se desempeñaba como presidente del Instituto Nacional de los Deportes (INDES), cargo que ocupa desde 2019 tras ser designado por el propio Nayib Bukele al inicio de su mandato presidencial. Desde esa posición impulsó proyectos de infraestructura deportiva y programas de desarrollo, lo que fortaleció su perfil dentro del deporte salvadoreño.
Con su llegada a la federación, el nuevo dirigente aseguró que buscará ordenar el futbol salvadoreño y realizar cambios urgentes, especialmente en las estructuras administrativas y deportivas, en un contexto marcado por resultados adversos y problemas institucionales acumulados durante años.
Uno de los primeros anuncios de Yamil Bukele fue la ratificación de Hernán Darío 'Bolillo' Gómez como entrenador de la selección mayor. La decisión se mantuvo pese al fracaso en el proceso rumbo al Mundial 2026, una eliminación que prolongó la ausencia de El Salvador en Copas del Mundo desde España 1982.

Continuidad del 'Bolillo' Gómez y debate por la autonomía del futbol salvadoreño
La continuidad del técnico colombiano generó opiniones divididas entre aficionados y analistas, quienes cuestionan la falta de resultados deportivos frente a la apuesta por la estabilidad del proyecto. Para la nueva dirigencia, mantener al seleccionador es clave para evitar más rupturas en un proceso ya debilitado.
Sin embargo, la elección de Yamil Bukele también reavivó el debate sobre la concentración de poder en torno a la familia Bukele y la independencia de las instituciones deportivas. Diversos sectores señalan que la cercanía entre el gobierno y la FESFUT podría comprometer la autonomía del futbol salvadoreño

Parte del contenido de este artículo fue elaborado con asistencia de herramientas de Inteligencia Artificial y revisado por un editor de RÉCORD.




