El exfutbolista del Manchester United, Paul Scholes, ha tomado una decisión profundamente personal: dejar su trabajo como comentarista deportivo para cuidar de su hijo Aiden, quien padece autismo severo. El mítico mediocampista inglés, que desarrolló toda su carrera en Old Trafford entre 1994 y 2013, compartió su historia en una emotiva entrevista en el podcast Stick To Football.
Scholes explicó que su prioridad es estar presente en el día a día de Aiden, de 20 años, quien requiere atención constante. “Tomé una decisión este año debido a Aiden, obviamente debido a sus necesidades especiales, como quizás ya sepan”, reveló el exjugador a sus antiguos compañeros Gary Neville y Roy Keane, junto a Ian Wright y Jill Scott, en la conversación.
Una decisión por amor y compromiso familiar
Paul Scholes no ha aparecido esta temporada en las transmisiones de TNT Sports, donde solía analizar los partidos de la Premier League y competiciones europeas. Su última colaboración fue en la final de la Europa League entre el Manchester United y el Tottenham Hotspur. "Obviamente, debido a sus necesidades especiales, Aiden requiere cuidados constantes, y sentí que debía estar más tiempo con él", comentó.
Aiden fue diagnosticado con autismo no verbal cuando era pequeño, lo que implica que necesita asistencia las 24 horas del día. Scholes y su exesposa Claire, de quien se separó en 2020 tras 27 años juntos, se reparten las tareas para garantizar que su hijo mantenga una rutina estable. "Organizamos la semana de modo que Aiden sepa qué día es. Eso le ayuda mucho", explicó el exfutbolista.
El exjugador también recordó los primeros momentos tras conocer el diagnóstico de su hijo. "La primera vez que jugué después de saberlo, contra el Derby County fuera de casa, no quise ir. El entrenador (Alex Ferguson) me quitó del once para la jornada siguiente y yo no le dije nada a nadie. Me costó varias semanas contárselo y fue bastante duro", confesó.
Scholes recuerda sus días en el United y su lucha personal
El inglés relató que, cuando recibió el diagnóstico, apenas sabía lo que era el autismo. "Nunca había escuchado sobre el trastorno del espectro autista hasta entonces", reconoció. En ese momento, Scholes se encontraba en plena etapa dorada del Manchester United bajo la dirección de Sir Alex Ferguson, junto a una generación de oro que dominó el futbol inglés.
Lejos de buscar lástima, el exjugador dejó claro que su motivación no es el reconocimiento, sino el bienestar de su hijo. "Ni entonces ni ahora quería compasión o lo que fuera", afirmó. "Mi gran preocupación ahora que me hago mayor es pensar en lo que va a pasar cuando ya no esté aquí. Eso es en lo que pienso todo el rato", agregó.
El testimonio de Scholes ha generado una ola de apoyo entre los aficionados y excompañeros del Manchester United, quienes destacaron su valentía y compromiso a pesar de llevar mucho tiempo sin ser compañeros de equipo.
