Entre risas y una advertencia disfrazada de ironía, Emilio Azcárraga protagonizó un momento singular junto a Igor Lichnovsky. El dueño del Club América aprovechó la presentación de una noble causa para recordarle al defensor chileno sus obligaciones tácticas, lanzando un comentario sobre su desempeño defensivo que sirvió de preámbulo para reconocer su calidad humana. Lo que comenzó como una típica "llamada de atención" sobre la cancha, terminó revelando la verdadera valoración que el directivo tiene sobre sus jugadores cuando estos deciden trascender fuera del ámbito deportivo.
El momento cumbre del evento llegó cuando el propietario de Grupo Ollamani tomó el micrófono para agradecer la iniciativa del andino, pero no sin antes soltar la "broma" que acaparó los reflectores. Azcárraga dejó claro que, aunque valora el corazón, no pierde de vista los errores en la zaga, utilizando un tono jocoso para validar el esfuerzo integral del futbolista.
¿Qué le dijo Azcárraga a Lichnovsky?
“No quedes bien conmigo, nada más que no te metan goles, que no te lesiones ni te ganen el sprint”, dijo Azcárraga, lo que provocó risas entre los asistentes.
Fiel a su estilo, Azcárraga expresó: “Gracias a Igor por todo lo que se ha integrado, por tu entrega y ejemplo, yo no solamente me fijo en lo que haces en la cancha, no solamente me importa que no te superen o que no te ganen la espalda, en América vamos más allá de Coapa y 90 minutos, el corazón es lo que nos ayuda a darle un poco a la gente”. Con esta frase, equilibró la exigencia deportiva de no perder la marca con la gratitud por la labor social.
Este intercambio se dio en el marco del lanzamiento de "Nace un Talento", un programa impulsado por Lichnovsky que busca apoyar a niños de escasos recursos. Sin embargo, para el mandamás de las Águilas, la responsabilidad del club no se detiene en los campeonatos. Azcárraga señaló: “La responsabilidad no nada más son los títulos para toda la gente que nos sigue, también es importante encontrar una comunidad en Coapa, la gente que no se ve, que ve lo que debemos de hacer para tener una mejor nación y darle la oportunidad a la gente que no tiene la posibilidad”.
Lichnovsky explica su iniciativa
La realización de este proyecto tiene un trasfondo agridulce para el defensor chileno. La grave lesión de ligamento cruzado que lo alejó de las canchas se convirtió, paradójicamente, en el catalizador necesario para materializar esta idea. Lejos de lamentarse por el tiempo inactivo, Igor utilizó esos meses de rehabilitación para cumplir una promesa que le había hecho al propio Azcárraga tiempo atrás.
El zaguero narró cómo surgió todo tras una charla con el dueño: “Un día llegué al América y nos fue muy bien como equipo, me tocó hasta marcar goles, me encontré con don Emilio Azcárraga y me pidió que le platicara mi historia, lo hice y este evento ya llevaba cinco o seis años en mi cabeza, con toda esa idea, me llegó la lesión del ligamento cruzado, me quedé con mucho tiempo libre y se volvió una realidad”.
El evento reunió a 35 niños de comunidades Mazahua, Tarahumara y Oaxaca, quienes sueñan con ser desde cantantes hasta beisbolistas. Para arroparlos, asistieron figuras como Alicia Lebrija de Fundación Televisa, además de referentes del plantel actual como Henry Martín, Jonathan Dos Santos y Víctor Dávila, junto a leyendas azulcremas como Germán Villa e Isaac Terrazas. Lichnovsky destacó al respecto: “El América tiene eso como identidad, va más allá de los 90 minutos, trasciende con un montón de programas... Hay momentos sociales, momentos de apoyar a los que no tienen tantas posibilidades como nosotros”.
Finalmente, quedó establecido que este es solo el comienzo de la faceta altruista del chileno bajo el escudo americanista. Con el respaldo institucional, el defensa mantendrá su búsqueda de nuevos talentos a lo largo de la República Mexicana, intentando que, al igual que en la cancha —donde debe cuidar que no le ganen la espalda—, fuera de ella nadie se quede atrás por falta de oportunidades.
