Javier Aquino se reunió con la directiva de Tigres este sábado con una idea: aceptar baja de sueldo y renovar un año más con los felinos. Pero esa propuesta nunca se platicó y nunca fue opción.

El jugador de 35 años de edad culminó contrato con los Tigres, y a pesar de que no tuvo pláticas previas con el club, en la reunión con la directiva en el Universitario, supuso que vendría una oferta para extender aunque tuviera que sacrificar salario.
Sin embargo, ni el cuerpo técnico ni la directiva se plantearon que Aquino continuara en el club norteño, la decisión estaba tomada para que partieran caímos, lo que sorprendió a Javier.

No hubo acuerdo previo
Durante el Apertura 25, en el que Tigres llegó a la Final, no existió acercamiento o plática entre Aquino y la directiva ni cuerpo técnico para plantear la renovación. En el club siempre pensaron que se acaba el ciclo como estaba en el papel y no habría renovación.
Tras conocer la postura de Tigres, que le agradeció al jugador la década que estuvo en El Volcán, con cinco Ligas más en su palmarés, Aquino se sintió contrariado y lo compartió en redes sociales.
“NO VOY A ESTAR EN UN LUGAR DONDE NO ME QUIEREN”
Javier Aquino anunció en redes que se va de Tigres:
“Yo siempre fui entregado al club. Me hubiera gustado despedirme de otra forma”. pic.twitter.com/5csNlDSmo2— DIARIO RÉCORD (@record_mexico) December 20, 2025
Más minutos para el futuro
El proyecto de Tigres tiene identificado con claridad al lateral que terminó como titular en la última época y que es el presente y futuro: Chuy Garza, el elegido por Guido Pizarro para la posición. Por eso, decidieron que Aquino no podría tener un rol de suplente, sino que podría buscar acomodo en otro equipo.





