La victoria de Estudiantes sobre Gimnasia, en una nueva edición del clásico platense, quedó rápidamente opacada por una serie de incidentes que se desataron tras el final del encuentro. Lo que debía ser una jornada de celebración deportiva terminó convirtiéndose en un escenario de tensión y violencia en distintos puntos de la ciudad.
Los primeros disturbios ocurrieron en las inmediaciones del estadio, cuando un grupo de hinchas de Gimnasia comenzó a arrojar piedras contra los agentes policiales que custodiaban la salida. Ante la agresión, la policía respondió con balas de goma, lo que generó un clima de mayor hostilidad y desató nuevos enfrentamientos.
Según confirmó la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte (Aprevide), 23 personas fueron detenidas como consecuencia directa de estos episodios. Las autoridades indicaron que ya se encuentran analizando las cámaras de seguridad para identificar a todos los involucrados en los actos violentos.
Además, la Aprevide informó que 12 agentes de seguridad finalizaron la jornada con heridas de distinta consideración producto de las agresiones sufridas durante el operativo. Ninguno de ellos estaría en riesgo, pero el organismo remarcó la gravedad de los ataques.
Lejos de terminar en la zona del estadio, la violencia se trasladó luego hacia el centro de la ciudad de La Plata. Allí, en medio de los festejos de los simpatizantes de Estudiantes, se produjeron corridas y golpes entre grupos rivales.
Pese al despliegue de seguridad dispuesto para el clásico, los choques entre hinchas del Pincha y del Lobo fueron inevitables. Las concentraciones espontáneas y la tensión entre los seguidores de ambos clubes derivaron en nuevos incidentes que obligaron a intervenir nuevamente a las fuerzas policiales.
Testigos señalaron que las disputas se extendieron por varias cuadras y afectaron el normal desarrollo de la actividad comercial y peatonal en la zona céntrica. Muchos locales debieron cerrar sus puertas de manera preventiva.
Las autoridades provinciales señalaron que continuarán analizando pruebas y registraciones para determinar responsabilidades y adelantaron que podrían aplicarse sanciones adicionales.
